Desde que surgieron los primeros proyectos centrados en la energía solar, la tecnología de este sector ha evolucionado a la velocidad del rayo. Los costes implícitos y la eficiencia de los paneles solares han mejorado exponencialmente, por lo que hoy es mucho más económico tanto la construcción como el mantenimiento de una planta de energía solar. Y todo eso sin tener en cuenta la diferencia de emisiones entre este tipo de energía y las habituales dependientes de combustibles fósiles.
Gracias a esto, las inversiones en energía solar se están disparando a lo largo y ancho del planeta. Los países de oriente medio e incluso potencias emergentes como la India, están apostando ya por este tipo de energía, tratando de aprovechar la inmejorable ubicación de estos países en relación a las horas de sol al año.
Compromiso medioambiental y ahorro de costes
Es un compendio de ventajas que hacen que la rentabilidad de los proyectos de energía solar sea alta. Es una tecnología menos costosa en montaje e instalación. Las plantas solares pueden llegar a ofrecer precios en las subastas en torno a los 0,04€ por KWh. Por ponerlo en contexto, solamente teniendo en cuenta el carbón que alimenta a una central térmica, sin sumar otros costes, ya cuesta más que eso.
Invertir en energía solar es una realidad del presente y del futuro. A medida que vayan pasando los años, seguiremos mejorando la tecnología y haciendo que esta energía siga haciéndose más eficiente. De hecho, se espera que en las próximas décadas, la energía se convierta en algo parecido a la fibra óptica y las lineas de datos en telecomunicaciones, no compensará medirla y se distribuirá en paquetes.
Los grandes beneficiados por supuesto serán los países que cuenten con mayor número de horas de sol al año. Mientras más cercanos al ecuador, mejor. Pero no solo dependerá de esto, sino que deberán haber construido durante estos años una infraestructura adecuada.
Por supuesto, la energía solar no podrá abastecer por si sola a todo el planeta. En determinadas zonas y durante algunos meses al año es imposible tener energía suficiente procedente del sol como para cubrir las necesidades. Por eso es importante poder hacerla coexistir con otros tipos de producción energética, donde las hidroeléctricas, eólicas o geotérmicas tienen mucho que decir.
¿Estamos ya preparados para enterrar a los combustibles fósiles? ¿Es hora de echar el cierre definitivo a plantas térmicas y nucleares? Esperemos que si y que suceda pronto.
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