Muchas veces oímos hablar sobre big data, pero no sabemos realmente de que se trata. A muy grosso modo y resumiéndolo mucho se podría definir como información y datos en grandes cantidades. Tan grandes que los sistemas de software convencionales no pueden manejarlos.
Esta inimaginable cantidad de datos son utilizados por las grandes compañías para resolver distintos problemas que, sin ellos no sería posible solucionar. Campañas de marketing estructuradas, ofertas de servicios personalizadas, optimización de recursos, desarrollo de nuevos productos…
Los continuos avances tecnológicos han hecho reducir de una forma notable el coste del almacenamiento y computación de estas ingentes cantidades de datos. De esta forma, al ser más fácil el acceso a ellos, las decisiones empresariales son mas precisas.
Las tres V del big data
La tecnología del big data se basa en lo que se denominan “las tres V”: velocidad, volumen y variedad. Son las claves para que un conjunto de datos tenga valor.
El volumen, o la cantidad de datos almacenados, importa. A mayor cantidad mejor será la capacidad de toma de decisiones. Se almacena absolutamente todo ya que todo es válido, feeds, click en un determinado punto, uso de apps, respuesta de sensores… hablamos de cientos de petabytes de datos que gestionar.
En cuanto a la velocidad, el ritmo al que se reciben los datos y al que el sistema es capaz de gestionarlos, también es de vital importancia. Cuanto más rápido sea capaz de manejarlos, mejor rendimiento podrá ofrecer al cliente. De hecho, el valor máximo se encuentra en la capacidad de gestionarlos y ofrecerlos en tiempo real.
Cuando se habla de variedad, se hace hincapié en los diversos tipos de datos disponibles. La información se puede clasificar en datos estructurados y no estructorados. Mientras que los primeros pueden organizarse fácilmente en una base de datos, los no estructurados (y semiestructurados) como texto, audio y vídeo requieren otro tipo de procesamiento para darles el valor correspondiente.
Como podéis comprobar, los sistemas de gestión de datos usan la última tecnología para un rendimiento casi perfecto. Ahora ya tienes una idea de por qué es tan importante cuidar lo que haces o donde cedes tus datos personales ya que, una vez que entren en los sistemas de almacenamiento, estarán al alcance casi de cualquiera.
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