Hay que hacer algo. No podemos permanecer impasibles como si nada sucediera, como si lo que tiene lugar a nuestro alrededor no fuera cosa nuestra. No podemos claudicar. La sociedad civil no puede rendirse. Es cierto que experiencias de traducción política del sentir ciudadano han dado al traste con las esperanzas de mucha gente. Ya advertía yo que la letra y música de Podemos eran disonantes. Pero quizás debamos ir por otro lado. La sociedad civil debe denunciar, movilizarse, actuar. Es más importante eso, que algún que otro diputado en el Congreso. Lo importante es hacer que la política se nutra del sentir ciudadano y para eso no pueden decirnos ellos, desde su universo paralelo, lo que se debe hacer o dejar de hacer. Debemos ser nosotros los que les mostremos el camino. Un claro ejemplo de lo que digo son las mareas ciudadanas que han dado interesantes frutos en los últimos años. No deberíamos dejarlas aparcadas, porque son tan necesarias o más que cuando iniciaron su andadura.
Habría que crear otra marea defensora de los derechos civiles, que contemplara los derechos básicos de todos los ciudadanos, que se manifestara contra las políticas de extranjería de los Estados de la UE y de la propia UE, que denunciara y pusiera freno al avance fascista de muchos gobiernos en el mundo, de demasiados. Me cuesta creer que mueran niños intentando llegar a nuestras costas y miremos para otro lado. Me indigna saber que muchos refugiados mueren de frío mientras que la UE no sólo no hace nada, sino que muestra su lado más insano. La reacción de la UE ante las políticas de Trump lo dice todo. Al menos, no quiere ser hipócrita, consciente como es de lo que está haciendo… De ahí su silencio cómplice.
Necesitamos el oxígeno de mentes preclaras como las de Javier de Lucas, infatigable defensor de los derechos de los inmigrantes. Hoy he leído esta entrevista que le han hecho, y más allá del pesimismo que la situación actual trasluce, creo que lo importante es destacar su creencia en la sociedad civil organizada como propulsora de la autodefensa de los valores y libertades democráticos. Yo también lo creo. A lo mejor no estaría de más que comenzáramos a organizarnos desde las Universidades para demandar respeto por los derechos humanos. Yo creo que estamos muy callados, porque las voces están muy dispersas. Tendríamos que unir la de todos los que pensamos que es necesario apuntalar un espacio de convivencia en el que primen los derechos de los ciudadanos por encima de otros intereses, para hacer que las conciencias no se adormezcan. Porque lo peor que nos puede pasar es que nos resignemos a pensar que otro mundo no puede ser posible.
Cuando la conciencia se adormece
Un lugar en el que estar
Mientras el mundo entero habla de la orden que el presidente norteamericano Trump ha dado para impedir la entrada de los nacionales de 7 países a su territorio, hoy hemos conocido que este fin de semana, sin que se especifique día ni hora, se ha encontrado muerto en Barbate a un niño de entre cinco y siete años de origen subsahariano. Mientras en Estados Unidos la población sale a las calles, se manifiesta, los sectores más mediáticos ponen énfasis en oponerse a tan nefasta orden y los fiscales actúan, en España, la subdelegación del gobierno ha considerado mejor silenciar una muerte, la de este niño, porque seguramente, con esa lógica a la que ya nos tienen acostumbrados los del signo político de este gobierno, lo que se ignora es como si no existiera. Y así nos va. Pero hoy ya lo sabemos. Sabemos que un niño ha muerto en nuestras costas; sabemos lo que España está haciendo desde hace tiempo en las vallas de Melilla, incumpliendo convenciones internacionales de las que forma parte. Sabemos también lo que está haciendo la Unión Europea con los refugiados. La única diferencia entre Estados Unidos y Europa es que en el país americano la gente se rebela y aquí agachamos la cabeza o miramos para otro lado.
Todo el mundo tiene derecho a un lugar en el que estar, en el que vivir en condiciones dignas. Los refugiados huyen de la guerra y les denegamos el acceso. En Estados Unidos, se ha ido más lejos, dictando órdenes que directamente impiden el acceso a los nacionales de determinados países. Nos hemos vuelto todos locos. La humanidad ha perdido el norte. Al final el choque de civilizaciones se producirá, no porque Huntington lo predijera sino porque existe tal crisis de valores que ya cualquiera puede ser presidente de una gran potencia, sin que haya resortes en el partido, en su propio partido, que le pongan freno. Pero el problema no es Trump. O no es sólo Trump. El problema es que no existe contrapoder suficiente para hacer de contrapeso. La Unión Europea ahí está, casi muda, con temor de que algunos de sus miembros se sientan ofendidos si van más allá en las críticas a Trump. Es lo que tiene jugar al mismo juego. Y entretanto, en Europa, en España permanecemos impasibles. Sin reparar en que toda persona tiene derecho a tener un lugar en el que estar. Se silencia la muerte de un niño por temor al qué dirán sin que importe, sin que les importe realmente la muerte de ese niño.
La buena educación
En estos tiempos que vivimos, en los que la cantidad ha sustituido a la calidad, en todos los ámbitos, yo hoy quiero romper una lanza por la buena educación. Probablemente no pueda esgrimirse ante ningún tribunal evaluador, ni dé lugar a ningún reconocimiento tangible; puede que no se cotice ni en bolsa ni en ningún otro lugar, pero es tan necesaria para poder vivir que no entiendo cómo no se hace más por promoverla y potenciarla.
La buena educación son hábitos adquiridos normalmente en el entorno familiar más cercano; la que proporcionan los padres y hermanos, los abuelos y los tíos, también los primos. La familia es la primera que debe educar en todos los sentidos, y si en ella rigen los buenos modales, normalmente el niño/la niña los irá adquiriendo. El colegio, creo, no es el sitio idóneo para enseñar buena educación ni modales, aunque ayuda a reafirmar los que ya se tienen y a corregir, si se puede, los malos hábitos. Es muy importante, por ejemplo, inocular el respeto por los compañeros y por los profesores desde bien pequeños. El respeto por el otro es básico en la buena educación. Y el saber hablar correctamente; no verbalizar violencia ni utilizar términos despectivos. Cuando se crece es necesario también ir adquiriendo patrones nuevos acordes a la edad y a los escenarios en que nos movemos. Pero sigue siendo básico siempre el respeto. El respeto por la situación del otro, por su trabajo, por su concepción de la vida. Si pretendemos que todo sea conforme a cómo lo vemos nosotros, estaremos contribuyendo a construir una concepción etnocéntrica, que a la postre nos termina aislando y empobreciendo.
Si algo queremos dejar a nuestros hijos e hijas, más que títulos, más que conocimientos sesudos ni experiencias en tropecientasmil actividades que se nos ocurran que pueden ser interesantes para su crecimiento personal, intentemos que sean respetuosos y comprensivos siempre, y cuando tengan comportamientos nobles con los otros, por más que desde nuestra visión ya curtida podamos dilucidar riesgos, reconozcámosles los buenos actos. En estos tiempos, no se cotiza ser buena persona y, sin embargo, considero que si hubiera más buenas personas este mundo que ahora tenemos sería menos injusto, más habitable y, por supuesto, más humano.
De nuevo sobre el Brexit
Que la presidenta de un país que ha decidido dejar la Unión Europea en referéndum tarde 6 meses en avanzar su hoja de ruta, ya es una noticia en sí misma. Da idea de la improvisación con que se ha hecho todo: la convocatoria del referéndum, la campaña, la quizás inesperada respuesta… Si tenemos en cuenta la trascendencia del paso a dar, esta comparencia llega tarde y realmente poco aporta. Lo único quizás novedoso es que ha reconocido que la comunicación de la apertura del proceso de desconexión al Consejo Europeo regulado en el art. 50 TFUE deberá ser ratificada por el Parlamento británico, algo que en principio no se daba por hecho. No sabemos, pues, cuánto habremos de esperar para que ese hecho se produzca. Entretanto, reina la confusión y el desasosiego para muchos ciudadanos y para muchas empresas.
Nos vamos a enfrentar a un hecho sin precedentes en la vida de la UE. Nunca antes un Estado había manifestado su intención de dejar el proyecto común de forma tan evidente. Son muchos los años compartidos, fuerte el andamiaje jurídico construido y para su deconstrucción hará falta algo más que buenas formas y palabras. No va a ser sencillo. La cuestión es que Reino Unido debería tener claro y el resto de países miembros también que si nos vamos porque no estamos conformes con la libre circulación de personas, tampoco asumimos la libre circulación de servicios, mercancías y capitales. No vaya a ser que al final se quiera mantener lo bueno (para quien tiene esa visión pacata de la vida en que prima sólo lo económico) y aparcar lo que no nos resulta útil. Es importante, por tanto, que se gestione bien desde la instancias europeas el proceso (cuando comience y si es que comienza). De lo contrario estaremos dando la puntilla al proyecto europeo. Y sería una pena.
Contra Goliat
Es una pena que la Universidad sea noticia por asuntos como los que aparecen en la prensa durante estos días. Rector plagiador, catedrático condenado a siete años de prisión por abusos sexuales a tres compañeras… No digo yo que en sí mismos estos hechos no merezcan ser objeto de tratamiento informativo, pero tengo la impresión de que la Universidad no está bien tratada por la prensa en nuestro país. Quizás debiera haber un espacio informativo que sirviera de escaparate para todo lo que se hace (y bueno) en la Universidad. Parece que eso no importa y, sin embargo, el I+D+i (investigación, desarrollo e innovación) genera más riqueza y conocimiento de lo que a primera vista se pudiera pensar y por supuesto de lo que se publicita a través de los medios. Pero es una lucha contra Goliat. Los mensajes negativos no sólo provienen de los medios, sino de los máximos responsables de educación, como el ministro del ramo afirmando que en España sobran estudiantes universitarios o declaraciones de similar o parecido cariz. Yo creo, sinceramente, que a la Universidad habría que mimarla. Precisamente porque representa un espacio vital para poder sobrevivir en un mundo en que priman intereses espúreos. Está claro que como todo espacio humano, es perfeptible, y que cuando tienen lugar conductas como el plagio o el abuso, sea del tipo que sea, toda la comunidad universitaria debería levantarse para aislar a quien así denigra la causa común. En esto último aún nos queda mucho por hacer. Como en todas las relaciones humanas, no siempre se hace lo correcto por muy claro que se tenga qué es lo que se debería. Pero más allá de todo, creo que también deberían potenciarse las buenas prácticas, los buenos resultados, la multitud de proyectos, ideas y ganas que hay en la gente que trabajamos en y para la Universidad que a la postre significa trabajar en y para la sociedad. Quizás sea una percepción equivocada, pero tengo la impresión de que a la Universidad no se la mima todo lo que sería necesario.
Noche de Reyes
Sigo teniendo la sana costumbre de escribir la carta a los Reyes Magos. Es un momento idóneo para hacer balance y plantearse nuevos retos, en forma de peticiones a sus Altas Majestades. Es verdad que cuando se tienen hijos, el tiempo se comprime y todo va demasiado rápido, pero hay que encontrar un hueco para ese momento que es íntimo y especial. Comparto con ustedes el deseo de que en estos tiempos convulsos, podamos hallar paz, que seamos capaces de dar siempre lo mejor, que el esfuerzo esté siempre entre nuestras actitudes, que no nos conformemos con menos de lo que consideremos que merecemos, que tengamos esperanza para encarar el futuro, por más que el presente no pinte muy halagüeño; en definitiva, que podamos contribuir a hacer este mundo un poco más habitable, para los que nos rodean y para nosotros mismos. Feliz noche y día de Reyes. Que no nos falte nunca la magia.
Fin de año
El año que termina no sabría cómo calificarlo. Ha habido de todo pero me quedo con lo bueno porque es lo único que ayuda a seguir. Presiento que el 2017 será un gran año. Ojalá que así sea para todos. Que sigamos teniendo sueños, pasión por alcanzarlos y salud para compartirlos.
Cuando se hace justicia: STJUE de 21 de diciembre de 2016, asuntos acumulados C-154/15, C-307/15 y C-308/15: de la retroactividad de la nulidad de las cláusulas suelo en los préstamos hipotecarios
Hace unos meses, cuando se conocían las conclusiones del Abogado General, P. Mengozzi, en este proceso, escribí en este mismo espacio un post titulado Nulidad de cláusulas suelo y retroactividad: ¿el Derecho al servicio de los bancos? Cuestionaba que fueran los intereses económicos los que se sobrepusieran al Derecho.
Hoy el TJUE ha hecho justicia (comunidado de prensa), dictando una resolución que es verdad que podría haber anticipado cualquier alumno de primero de Derecho pero que ha habido que esperar a esta sentencia para que el Tribunal Supremo español se diera por enterado: si se determina que una cláusula es abusiva y por tanto nula, sus efectos deben retrotraerse al momento en que se incorporó al contrato de préstamo en cuestión, no pueden limitarse sus efectos al momento en que el Tribunal Supremo dictó su sentencia. Así se indica nítidamente en el fundamento 61 de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea: “De las consideraciones anteriores resulta que el artículo 6, apartado 1, de la Directiva 93/13 debe interpretarse en el sentido de que procede considerar, en principio, que una cláusula contractual declarada abusiva nunca ha existido, de manera que no podrá tener efectos frente al consumidor. Por consiguiente, la declaración judicial del carácter abusivo de tal cláusula debe tener como consecuencia, en principio, el restablecimiento de la situación de hecho y de Derecho en la que se encontraría el consumidor de no haber existido dicha cláusula.”.
Esto que era evidente ha costado mucho demostrarlo. Así que mi enhorabuena para los consumidores que decidieron llevarlo a los tribunales y enhorabuena al juzgado de lo mercantil nº 1 de Granada y a la Audiencia Provincial de Alicante que presentaron sus respectivas cuestiones prejudiciales. Gracias por cuestionar lo que había sostenido el Tribunal Supremo. A veces, y sólo a veces, el Derecho es Justicia y no derecho del más fuerte.
Estadísticas
En esta volátil realidad que vivimos, donde los acontecimientos se superponen unos a otros, donde todo parece tener lugar al mismo tiempo, donde la información cuando no la opinión todo lo invade, los datos, los números nos ayudan a dibujar con mayor nitidez las realidades. Se lleva una contabilidad anual de los fallecimientos por accidentes de tráfico, y se sacan los datos históricos en cada campaña para comprobar cuál es la tendencia; se hacen cálculos también para ver lo que nos va a costar a cada español el rescate de las autopistas y se nos dan datos, veraces o no, para minimizar lo que es una inmoralidad a todas luces, puesto que con nuestro dinero se rescatan empresas y no personas, de carne y hueso. ¿Acaso no se nos debería preguntar a todos los que vamos a pagar este desastre si queremos hacerlo o si preferimos que nuestro dinero vaya a otros fines, más en la línea con lo que cada uno cree y piensa? Hay datos también de las mujeres asesinadas por violencia de género. Se cuentan por números. Y estos números sí que me provocan una tristeza extrema. Cuando este fin de semana se decía “tres víctimas de la violencia machista en tan sólo 48 horas” algo no me sonaba bien. Como tampoco los titulares de ayer y de hoy que hablan de un periodista al que identifican con nombre y apellidos y ponen delante de su mujer “el periodista… hallado muerto junto a su mujer”, a la que todo indica que ha asesinado y luego se ha suicidado. Imagino que los medios serán conscientes de la importancia que tiene contar bien las noticias y no introducir ciertos sesgos en las mismas, y sin embargo, es rara la noticia de estos casos que no esté repleta de una visión machista de la realidad. Está claro que combatir la violencia de género es difícil, y que se ha repetido hasta la saciedad que la clave está en la educación, en los colegios y en las familias, sin que luego eso tenga un verdadero recorrido y seguimiento. Pero hay otras cuestiones, estas jurídicas, que a mi juicio aún no se han encarado debidamente. Por ejemplo, no es comprensible que un hombre que tenga orden de alejamiento sobre su mujer (y mucho menos si ya ha sido condenado) pueda seguir ejerciendo el derecho de visita sobre sus hijos. Los hijos, particularmente si son menores, son las víctimas más indefensas en toda esta lacra, y en muchas ocasiones no se les da el tratamiento idóneo. Un hombre que ha maltratado a una mujer no merece, a mi juicio, seguir teniendo la patria potestad sobre sus hijos. Sí, sé que muchos civilistas no estarán de acuerdo con lo que digo, pero si la violencia se ejerce en el hogar, los niños también son víctimas y como tales deben ser protegidos. También creo que es importante que el entorno ponga cara y nombre a los maltratadores, por lo que las órdenes de alejamiento deberían comunicarse a los centros de trabajos de estos. Ahora, todos los que maltratan, los que asesinan se amparan en el anonimato, pero si su nombre circulara por donde se pueden sentir más vulnerables, quizás estaríamos en otro escenario. Los datos están ahí y hablan por sí solos.
Sin título
Hoy escribo por no faltar a mi cita semanal con el blog, pero hoy me faltan las palabras. Esta mañana me enteraba del fallecimiento del hijo de un querido compañero mío. Coincidimos en Cáceres, en la etapa en que ambos realizábamos la tesis como becarios de investigación FPI de la Junta de Extremadura. Aunque no hemos mantenido un contacto frecuente, siempre que nos veíamos charlábamos como si no hubieran pasado los años. La vida puede ser tan cruel. Nadie se merece esto, pero menos Javier. Lleno de bondad, de responsabilidad y con una capacidad de trabajo fuera de serie. En días como estos faltan las palabras.
Búsqueda
Entradas recientes
- Veinte años de la entrada en vigor en España de la Ley de matrimonio entre personas del mismo sexo
- La Instrucción de 28 de abril de 2025, de la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública, sobre actualización del régimen registral de la filiación de los nacimientos mediante gestación por sustitución vulnera el interés superior del niño
- Lecciones aprendidas. (A propósito de la Dana)
- Comenzamos curso
- Gracias
Categorías
| L | M | X | J | V | S | D |
|---|---|---|---|---|---|---|
| « jun | ||||||
| 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | |
| 7 | 8 | 9 | 10 | 11 | 12 | 13 |
| 14 | 15 | 16 | 17 | 18 | 19 | 20 |
| 21 | 22 | 23 | 24 | 25 | 26 | 27 |
| 28 | 29 | 30 | 31 | |||
Archivos
- junio 2025 (2)
- noviembre 2024 (1)
- septiembre 2024 (1)
- mayo 2024 (1)
- diciembre 2023 (1)
- noviembre 2023 (1)
- mayo 2023 (1)
- abril 2023 (1)
- marzo 2023 (1)
- febrero 2023 (1)
- enero 2023 (2)
- diciembre 2022 (1)
- octubre 2022 (1)
- septiembre 2022 (2)
- agosto 2022 (1)
- julio 2022 (3)
- junio 2022 (1)
- mayo 2022 (1)
- abril 2022 (1)
- marzo 2022 (2)
- febrero 2022 (5)
- enero 2022 (3)
- diciembre 2021 (2)
- noviembre 2021 (1)
- octubre 2021 (3)
- septiembre 2021 (4)
- agosto 2021 (1)
- julio 2021 (3)
- junio 2021 (4)
- mayo 2021 (2)
- abril 2021 (2)
- marzo 2021 (2)
- febrero 2021 (2)
- enero 2021 (3)
- diciembre 2020 (5)
- noviembre 2020 (4)
- octubre 2020 (4)
- septiembre 2020 (4)
- agosto 2020 (2)
- julio 2020 (4)
- junio 2020 (5)
- abril 2020 (2)
- marzo 2020 (1)
- febrero 2020 (1)
- enero 2020 (3)
- diciembre 2019 (2)
- noviembre 2019 (4)
- octubre 2019 (1)
- septiembre 2019 (1)
- agosto 2019 (1)
- julio 2019 (3)
- junio 2019 (1)
- mayo 2019 (2)
- abril 2019 (3)
- marzo 2019 (2)
- febrero 2019 (4)
- enero 2019 (3)
- diciembre 2018 (3)
- noviembre 2018 (1)
- octubre 2018 (1)
- septiembre 2018 (4)
- julio 2018 (1)
- junio 2018 (3)
- mayo 2018 (1)
- abril 2018 (1)
- marzo 2018 (1)
- febrero 2018 (2)
- enero 2018 (4)
- diciembre 2017 (3)
- noviembre 2017 (1)
- octubre 2017 (1)
- septiembre 2017 (4)
- agosto 2017 (1)
- julio 2017 (4)
- junio 2017 (4)
- mayo 2017 (5)
- abril 2017 (2)
- marzo 2017 (5)
- febrero 2017 (4)
- enero 2017 (5)
- diciembre 2016 (5)
- noviembre 2016 (4)
- octubre 2016 (4)
- septiembre 2016 (6)
- agosto 2016 (1)
- julio 2016 (5)
- junio 2016 (6)
- mayo 2016 (4)
- abril 2016 (6)
- marzo 2016 (4)
- febrero 2016 (4)
- enero 2016 (6)
- diciembre 2015 (6)
- noviembre 2015 (5)
- octubre 2015 (4)
- septiembre 2015 (7)
- julio 2015 (3)
- junio 2015 (5)
- mayo 2015 (5)
- abril 2015 (4)
- marzo 2015 (4)
- febrero 2015 (4)
- enero 2015 (4)
- diciembre 2014 (4)
- noviembre 2014 (3)
- octubre 2014 (6)
- septiembre 2014 (5)
- julio 2014 (3)
- junio 2014 (4)
- mayo 2014 (3)
- abril 2014 (4)
- marzo 2014 (4)
- febrero 2014 (4)
- enero 2014 (4)
- diciembre 2013 (3)
- noviembre 2013 (3)
- octubre 2013 (6)
- septiembre 2013 (4)
- julio 2013 (3)
- junio 2013 (4)
- mayo 2013 (4)
- abril 2013 (4)
- marzo 2013 (4)
- febrero 2013 (6)
- enero 2013 (4)
- diciembre 2012 (4)
- noviembre 2012 (4)
- octubre 2012 (5)
- septiembre 2012 (4)
- julio 2012 (6)
- junio 2012 (4)
- mayo 2012 (4)
- abril 2012 (4)
- marzo 2012 (4)
- febrero 2012 (4)
- enero 2012 (3)
- diciembre 2011 (1)
- noviembre 2011 (5)
- octubre 2011 (2)
- septiembre 2011 (1)
- julio 2011 (1)
- junio 2011 (4)
- septiembre 2010 (1)
- junio 2010 (1)












