La misión Dart
El 26 de septiembre, a las 23:14 UTC, un satélite de 600 kilos lanzado por la NASA impactaba a 6 km/s contra un asteroide situado a 11 millones de km de la Tierra. Era un primer ensayo para probar que disponemos de tecnología para hacer frente a la amenaza que suponen los asteroides y cometas, ya se habían hecho pruebas contra cometas pero el fin no era desviarlos. El impacto se produjo contra Dimorphos a un minúsculo asteroide de solo 160 m que orbitaba en torno a otro mayor Didymos, en un tiempo de 11 horas y 55 minutos. Tras el impacto este tiempo se ha reducido en 32 minutos, una muestra clara de que el impacto DART lo ha acercado al asteroide mayor en una distancia similar a la longitud de una pista de tenis. Una prueba clara del éxito de la misión. Desde entonces al ser observado por los telescopios se ve que va dejando un trazo como si se tratase de un cometa. La desviación ha sido mayor de la esperada, debido a que Dimorphos realmente es un conjunto de escombros débilmente unido por la gravedad, de forma que el impacto ha ido un choche muy inelástico, y los materiales liberados actúan como si fuese un propulsor que de acuerdo a la primera ley de Newton frenan el asteroide que baja a un órbita mas próxima a Didymos y con un periodo orbital menor. Según nos cuenta Josep Maria Trigo Rodríguez: “ Más adelante, con la misión Hera de la Agencia Europea del Espacio (ESA) investigaremos ambos asteroides, el cráter excavado por DART y completaremos un estudio más detallado de su estructura y composición. Porque para poder desviar a un enemigo asteroidal, hay que conocerlo bien”.
Que la prueba haya sido un éxito no significa que ya estemos preparados contra el impacto de asteroides, hemos dado un pequeño paso en esa dirección. El relativamente gran desvió producido se ha debido a dos hechos particulares: a) La desviación es respeto a un cuerpo pequeño, Didymos, de unos 800 m, con una débil gravedad y b) Didymos ha resultado ser muy adecuado para acrecentar el efecto del impacto, si hubiese sido una roca solida, la desviación habría sido mucho menor
La forma en que se ha determinado la órbita es empleado un método bien conocido por los aficionados a la Astronomia, conocido como método del transito, que habitualmente se emplea para estudiar los sistemas dobles eclipsantes y en la búsqueda de exoplanetas. Consiste, en medir como varia la luminosidad de Didymos, cuando Dimorphos se interpone entre el y la Tierra, y construir la curva de luz, como se muestra en la animación de abajo, que tomamos de Daniel Marín en la mejor web en español sobre astronáutica.
Otras historias de meteoritos y cometas
Nos pueden parecer, como paso con la pandemia de la COVID, que estas amenazas solo aparecen en películas o en tiempos de los dinosaurios, pero hace algo más de 100 años, el 30 de junio de 1908 uno de ellos de solo unos 50 metros destrozó de 2200 kilómetros cuadrados de Tunguska, una zona deshabitada de la taiga siberiana. De haber ocurrido en zonas pobladas las consecuencias habrían sido serían devastadoras. “Los 30 junio han pasado a ser considerados por la UNEZCO Día del asteroide”.
En las proximidades de mi pueblo (en Ojuelos Altos) unos años después, en 1926, cayó los fragmentos de un meteorito, durante su recorrido el sonido fue escuchado en decenas de km dando lugar a una rocambolesca historia por adueñarse del mayor fragmento del meteorito. Todos los años ocurren varios casos en las que los fragmentos llegan a la superficie terrestre, la mayoría en el mar. De hecho, no se conoce ningún caso de alguien que haya muerto por un meteorito. Es probable que algunas catástrofes históricas si fuesen originadas por meteoritos, pero nadie supo interpretarlas.
Como otros astrónomos profesionales o aficionados, suelo descargar la base de datos de asteroides y meteoritos disponible en: The Minor Planet Center (MPC), auspiciado por la Unión astronómica Internacional (IAU). La última vez que lo hice el inventario era de mas de 1,2 millones. Afortunadamente la mayoría quedan muy alejados de la órbita terrestre. A los que más se temen son a los menores a 200 m pues son los mas difíciles de detectar, frecuentemente se detectan con pocos días de antelación, especialmente si aparecen tras el Sol. De este tipo era el que en 2013 produjo graves destrozos en la ciudad rusa de Cheliábinsk.
En 1994 hubo un suceso que fue noticia varios días. El cometa Shoemaker- David 9 que había sido capturado por Júpiter, se fragmentó al estar sometido a la intensa fuerza gravitatoria de éste planeta. Descubierto por Carolyn y Eugene Shoemaker, cuyas cenizas reposan en la Luna, y David Levy, autor de Observar el cielo, uno de mis libros mas recomendables para la introducción practica a la astronomía. Los fragmentos impactaron contra el hemisferio sur de Júpiter entre los días 16 y 22 de julio de 1994, a 60 km por segundo y lo vimos por televisión y los podéis ver aquí. El mayor alcanzaba 2 km, de haber impactado contra la Tierra pocos habrían sobrevivido. La paradoja es que Júpiter es a la vez nuestro salvador, pues actúa como un escudo protector, reduciendo el número de cometas que se dirigen al sistema solar interior en el que estamos nosotros.
Tenemos que estar alertas, estamos en un campo de tiro y no sabemos es cuando habrá un objeto de suficiente tamaño que acierte .
Entrevista a Josep Maria Trigo-Rodríguez, una autoridad en Asteroides y Cometas
En radio usal Eureka hemos entrevistamos (video: EUREKA La misión Dart y podcast.> Aquí o iVoox) a Josep Maria Trigo-Rodríguez, sobre la misión Dart, en la que está involucrado. Aprovechamos para nos hable de Asteroides y Cometas, y nos comente su libro La Tierra en peligro, que acaba de publicar. En el prólogo el eminente astrónomo Iwan WILLIAMS dice: “En este libro Trigo-Rodríguez hace un esfuerzo considerable para resumir nuestro conocimiento actual en estos campos que será crucial para tratar otros temas clave como, por ejemplo, poder desviar asteroides como hará la misión DART, o identificar los objetivos más relevantes para la exploración de nuestro sistema solar en el futuro” próximo.
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