En la actualidad la escolarización es obligatoria hasta los 16 años lo que implica que las instituciones educativas deben atender de la manera más adecuada a todos y cada uno de los alumnos de su centro poniendo especial atención a aquellos que tengan más dificultades.
Para poder realizar esta tarea a cabo los profesores cuentan con diferentes herramientas como las adaptaciones curriculares no significativas, que pueden ir desde actividades diferentes según las necesidades del alumno, a utilización de material especial.
Sin embargo, a veces estas herramientas no son suficientes y los profesores necesitan ayuda externa y entonces debe evaluarse al alumnado para integrarlo en programas de apoyo escolar o pedir adaptaciones curriculares significativas.
Para detectar y tratar a los alumnos con más dificultades, todos los centros educativos tienen un equipo de orientación que se encargará de evaluar las necesidades del alumno, ayudar a los profesores responsables para que aprendan y apliquen las medidas oportunas y, en definitiva, pondrán en marcha las medidas oportunas y realizarán un seguimiento de la situación.
Este apartado, dentro de la dinámica de un centro educativo es muy importante ya que, debido a la obligatoriedad de la educación secundaria, existe una gran heterogeneidad dentro de las clases pero eso no debe impedir que todos y cada uno de los alumnos alcance su máximo desarrollo personal. Para ello la formación y preparación de los profesores y el compromiso del equipo de orientación es muy importante.
