Esta charla ya tiene sus añitos (2006), y sin embargos sigue siendo tan válida como entonces. He de admitir que la he tenido que ver un par de veces, no porque no captara lo que decía, sino porque Ken Robinson tiene una manera de atraer la atención de su público que me dieron ganas de volver a ver la charla.
La idea principal de la charla es el por qué no se deja a los niños ser creativos, el por qué en esta sociedad que tenemos se le da mucha importancia a ciertas materias, como son la lengua y las matemáticas, cuando se dejan otras de lado, como son el arte o la música. Esto no quiere decir que las matemáticas o la lengua no sean importancia, sino que quizás no tenemos que dejar tan de lado otras materias.
Un concepto que me ha gustado mucho ha sido el de que la sociedad busca académicos, y toda la educación pública se basa en eso, en llegar a la universidad, cuando hay otras salidas que son tan válidas como el ir a la universidad.
Tenemos que cambiar el chip como sociedad, dejar que los niños busquen lo que les gusta, y no cohibirles el hacer esas cosas. Debemos dejar que los niños sean creativos, que se equivoquen, no dejar que se hundan porque no les salgan las cosas, estar ahí para ellos.
Para mí Ken Robinson es un buen ponente entre otras cosas porque es capaz de reírse de sí mismo, de hacer una charla en la que va intercalando historias de su vida (a modo chiste). Se ve como el público no deja de mirarle en ningún momento, porque realmente no quieren que se acabe, como me pasó a mí cuando lo vi por primera vez.
Por último, quería volver a insistir a cualquiera que vea este blog que vea la charla de este señor, porque se le va a hacer muy corta. También he de admitir que he compartido el vídeo con amigos míos porque creo que todo el mundo se merece oír a este hombre alguna vez.
