EUROPAPRESS 21/03/2019. [Noticia seleccionada y comentada por: Angie Tatiana Pérez Heredia. Grado en Trabajo Social]
Según advierte la ONG, Save The Children, los menores migrantes que llegan solos a España, los llamados “MENAS”, en muchas ocasiones son victimas de racismo y xenofobia. Son vistos como delincuentes y por ello no son tratados como los niños y niñas vulnerables que en realidad son. La organización pide una mayor coordinación a todas las administraciones, así como una mayor vigilancia y actuación al Estado para que se cumplan las obligaciones y convenios en materia de protección y acogida de la infancia. Solo de esta forma se podrá paliar el problema de desprotección social que sufren estos menores.
En el 2018, la cifra de menoras migrantes no acompañados que llegaron a España ascendió a casi 12.500. Datos que evidencian la necesidad de abordar este problema de manera urgente, la inmigración es un duro proceso para cualquier persona, pero para los menores que no cuentan con ningún apoyo y se tienen que enfrentar al desarraigo, al aprendizaje de un nuevo idioma, al acceso a la documentación y a la regularización administrativa, entre otros muchos problemas supone una agravante de la situación. Además, si a todo esto tenemos que añadir la criminalización y el aumento de odio hacia ellos, hacemos frente a un problema social. Por ello coincido con la ONG, es necesaria una mayor coordinación y la implementación de criterios de traslado con el fin de ubicar a los menores de la mejor manera en todas las Comunidades Autónomas, además también se evitará el colapso de los centros y los problemas en los mismos, dándole a los menores la atención de calidad que merecen.
