Peligros para nuestro perros (II)

30/08/15, 14:07

Heridas, cortes

Si sólo está dañada la epidermis, basta con limpiarla y aplicar sobre ella mercurocromo. Si se ha cortado todo el espesor de la piel y quedan al descubierto los músculos, será preciso suturar para impedir que la infección progrese rápidamente por vía subcutánea. No obstante, si no puede encontrar un veterinario en el plazo de 36 horas, la sutura ya no es posible e incluso es perjudicial. Entonces se imponen los cuidados cotidianos siguientes: limpieza de la herida con agua oxigenada, espolvoreo con penicilina o sul-famidas, recubrimiento con gasa y con venda.

Debe evitarse que el perro lama la herida, pues, aunque acaso la limpie, contribuye a retrasar su cicatrización.

Las heridas de los ojos deben cuidarse de inmediato, pues las complicaciones se presentan rápidamente y pueden conducir a la ceguera: lavado con una solución de agua tibia ligeramente salada, colirios de argirol, gotas de tifomicina, son las primeras precauciones que deben tomarse. El pronóstico dependerá de la parte del ojo afectada. Si sólo han sido afectados la membrana conjuntiva y los párpados, la curación es rápida. Si el mal afecta a la córnea, aparecerá una mancha que tardará en desaparecer. Si ha reventado el ojo, la visión puede salvarse con una intervención inmediata, que consiste en suturar la córnea o la cubierta conjuntiva. Si el traumatismo alcanza a todo el ojo, no hay esperanza alguna y será preciso enuclear, es decir, quitar el ojo. En la actualidad existen ojos de vidrio casi perfectos. Cuando exista una herida profunda y sucia, primeramente, se le habrá de limpiar la herida, y, a continuación, se le administrarán antibióticos de suero anticangrenoso. Nunca intente sondear o limpiar una herida con instrumentos que no estén perfectamente limpios.

 

Peligros para nuestro perro

 

Hipo

Es un trastorno frecuente en los jóvenes. No tiene ningún valor patológico serio y rápidamente se calma sin cuidados especiales. No obstante, es conveniente que piense en suministrar al animal posteriormente algún vermífugo.

Cuerpos extraños

La glotonería de los jóvenes cachorros les lleva a ingerir numerosos objetos que pueden encontrar en su casa (bolas, cápsulas de botellas, monedas, clavos). Pero el perro adulto no está libre de los accidentes causados por los cuerpos extraños, pues, más a menudo de lo que se cree, traga en su alimento cuerpos extraños, como agujas, espinillas de gramíneas, huesos demasiado gruesos o simplemente puntiagudos. En general, los signos sólo se manifiestan cuando el objeto se detiene en la boca o en el cruce de las primeras vías digestivas en la faringe. El animal en seguida manifiesta molestias y dificultad en la deglución. Parece como si con las patas quisiera coger alguna cosa situada en la boca. Al abrir la cavidad bucal puede usted ver el cuerpo extraño; estará escondido entre los dientes o implantado en las mucosas. Hay que mirar muy adentro, hacia la faringe o el velo del paladar donde suelen implantarse los objetos puntiagudos. Si se siente capaz de ello, sostenga fuertemente al animal, con la boca abierta con un trozo de madera colocado entre las muelas, por ejemplo, para evitar que cierre las mandíbulas y, con ayuda de una larga pinza, trate de retirar el cuerpo extraño. Sin embargo, deberá tener cuidado de no empujarlo más adentro, pues el perro lo tragaría y, en ese caso, no quedaría más remedio que practicarle una operación quirúrgica. Si el cuerpo extraño se hubiera introducido en el esófago y después en las vías digestivas posteriores, debería recurrir a un veterinario.

El paso del cuerpo extraño por las vías digestivas puede provocar lesiones en la faringe o en el estómago y ocasionar vómitos; más tarde, y si por suerte el cuerpo extraño atraviesa el tubo digestivo sin ocasionar otros daños, provocará dolores cuando sea expulsado en la defecación.

En el caso de que un cuerpo extraño haya pasado al esófago, puede facilitar su paso, si se trata de un cuerpo redondo no puntiagudo, administrando al animal la siguiente dosis de aceite de parafina: una cucharadita de café o una cucharada sopera, según el tamaño del perro, tres veces al día.

 

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Indigestión

Es un fenómeno corriente y un síntoma menor. En general, el animal se cura por sí mismo vomitando el exceso de alimento. Este tratamiento se puede completar si se permite que el estómago descanse durante un día aproximadamente, no permitiendo que el animal coma nada y administrando al animal una cucharadita de café de bicarbonato sódico.

Urticaria

Con relativa frecuencia puede verse en un cachorro joven una hinchazón considerable de la cabeza acompañada de inflamaciones en todo el cuerpo. El animal toma un aspecto relativamente espantoso, lo que, por suerte, sólo es espectacular. Es la urticaria. La urticaria puede haber sido provocada por la presencia de parásitos digestivos (ascárides), por haber lamido u olido pintura, barniz o disolvente (acetona) o por la ingestión de cuerpos alimenticios en malas condiciones. Déle de inmediato jarabe de fenergán (una cucharada de café o sopera según el tamaño del animal). Los síntomas deberán desaparecer o al menos atenuarse considerablemente en la hora siguiente. Si no es así, lleve a su perro al veterinario.

Peligros para nuestro perro

Peligros para nuestro perro (I)

30/08/15, 14:05

Descargas eléctricas

Jugando, un perro puede mordisquear un supletorio que usted ha dejado arrastrando. También puede lamer un enchufe o cortar un cable de la luz o de la plancha. Si la descarga es fuerte (220 V) puede originar pérdida de conocimiento del animal. Es muy grave y exige que se practique al animal la respiración artificial. Puede usted hacerla de boca a boca o mejor de boca a nariz; es preciso insuflar aire y realizar de este modo una aireación artificial para evitar la asfixia. Para ello, extienda la cabeza del perro, aplique su boca sobre sus narices e insufle al ritmo de la respiración. También puede apoyar las dos manos extendidas sobre las costillas y después dejar que se relajen regularmente. Cuando la descarga eléctrica es leve, puede traducirse simplemente en necrosis de la piel, una especie de quemadura que es preciso desinfectar y empapar con colutorios, si ha sido en la boca, o con betadine si se trata de cualquier parte del cuerpo.

Peligros para nuestro perro

Quemaduras

Aparte de la descarga eléctrica que acabamos de describir, hay muchas otras causas que producen quemaduras: agua hirviendo, incendio, plancha, aparatos de calefacción. El animal manifiesta rápidamente gran dolor. Puede que sea sólo el pelo el que se ha quemado o que la quemadura haya alcanzado a la piel en diversos grados. Una quemadura superficial puede bañarse con betadine, una solución de ácido pícrico, un linimento o aceite de hígado de bacalao. Los homeópatas, es decir, los médicos que curan con dosis mínimas de aquello que en mayores cantidades produce los mismos síntomas que se desean combatir, utilizan la tintura de Calaguala. Cuando la quemadura es más profunda, exige necesariamente la intervención de un veterinario, pues una necrosis de este tipo puede ser causa de una infección seria. Mientras llega el veterinario puede cubrir la herida con polvos de sulfato.

Si un perro ha sufrido quemaduras graves, con ocasión de un incendio, por ejemplo, pueden sobrevenir accidentes secundarios por reabsorción de los tejidos quemados, lo que implica una intoxicación del organismo, o por lesiones pulmonares debidas a la inhalación de humo.

Cuando haya quemaduras debidas a agentes químicos (ácido, lejía, sosa cáustica), habrá que consultar al veterinario inmediatamente.

 

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Intoxicaciones o envenenamientos

En casa, un animal puede encontrar numerosas fuentes de envenenamiento. Puede tratarse de productos de utilización casera como ceras líquidas, naftalina, lejía, etc. Estos envenenamientos provocan signos de gravedad variables según la cantidad ingerida. Lo más importante es lograr que el perro vomite. Para ello puede utilizar un emético, ipecacuana, sulfato de cobre, agua muy salada o una mezcla de agua oxigenada y 4 partes de agua que dará por la fuerza al animal. Si no, será preciso que vaya inmediatamente al veterinario para que le administre una inyección subcutánea de apomorfina que provoque el reflejo del vómito durante los siguientes cinco minutos. También puede recurrir a un purgante (aceite de ricino, sulfato de sodio), pero tras la ingestión de productos fosforados, es preciso no dar al perro cuerpos grasos. Lo más importante es neutralizar a continuación el producto ingerido mediante un antídoto (telefonee al hospital más próximo a su domicilio). Si no conoce el veneno ingerido, puede preparar claras de huevo batidas en leche, carbón animal y magnesia hidratada. Cuando la intoxicación es grave, se manifiesta mediante serios trastornos gastrointestinales: vómitos, diarreas, hemorragias intestinales con excitación o coma, convulsiones y dolores intensos. No hay que esperar a que aparezcan todos estos síntomas, y, si sospecha que su perro ha tragado un medicamento o un tóxico, lo mejor será llevarlo lo más rápidamente posible al veterinario, incluso aunque parezca estar bien, pues los trastornos pueden presentarse más tarde.

Otras posibles causas de envenenamiento son el gas de alumbrado, el butano o el propano. El cachorro puede intoxicarse al desconectar el tubo de conducción de la cocina o del aparato de calefacción; al mordisquearlo absorbe gran parte del gas tóxico. Como el perro vive más cerca del suelo que el hombre, y este tipo de gas es más pesado que el aire, manifiesta antes que usted síntomas de intoxicación. Estos síntomas consisten primero en somnolencia, después en sueño letárgico y por último en coma. Estas intoxicaciones son muy peligrosas, pues el gas carbónico se fija en los glóbulos de la sangre impidiéndoles el transporte de oxígeno a las células. Si su animal está en coma, es preciso practicarle inmediatamente la respiración artificial manual o «boca a boca», pero deberá conducirlo inmediatamente a un veterinario que disponga de instalación de reanimación por insuflación de oxígeno, o telefonear a los bomberos quienes colocarán a su animal oxígeno Al tiempo que atiende a estos cuidados dé urgencia, tras una intoxicación hay que combatir los síntomas de abatimiento y otros generales con tónicos cardiacos, diuréticos e inyecciones de suero fisiológico. El abatimiento puede tratarse con la administración de café o té; la excitación se elimina con jarabes de bromuro; los vómitos se calman con agua de cloroformo, y las diarreas se detienen con bismuto o carbón.

 

Peligros para nuestro perro

 

EL Shih Tzu

30/08/15, 13:42

El shih tzu o shitzu es una de las razas de perros pequeños más apreciados .En China, shih tsu significa león. En la religión budista, el león es considerado como un animal atributo de la divinidad; en las antiguas pinturas, Buda era representado a veces junto a un león. Ahora ya no hay leones en China, ni siquiera en el Tíbet, y quizá por este motivo los pequeños perros de aspecto leonino son tan apreciados por los habitantes de aquellas regiones.

 

razas de perros pequeños

 

Formados probablemente en la corte de Celeste Imperio, mediante el cruce de los perros pequeños y sagrados del Tíbet con los antepasados del pequinés moderno, fueron importados por primera vez a Inglaterra en 1930, y desde entonces, muchos ejemplares fueron criados con mucho cuidado en Europa. Desdichadamente, en algunos casos se los cruzó con pequineses para obtener una estatura menor.

Rasgos generales: Perro muy activo, desenvuelto, atento, de porte altivo.

Peso: Máximo, 9 kg.

Cabeza:  Ancha, redonda, amplia entre los ojos, con pelo enmarañado que cae sobre aquéllos; barba y bigotes tupidos. Dentadura en pinza o levemente prognática.

Ojos: Grandes, oscuros, redondos, poco salientes.

Orejas: Grandes, caídas, implantadas levemente por debajo de la coronilla. Con mucho pelo que se confunde con el del cuello.

Tronco: El largo desde la cruz a la base de la cola es mayor que la altura en la cruz. El tronco es compacto y vigoroso. Tórax amplio y profundo con línea dorsal recta.

Cola: De inserción alta, bien enroscada sobre el dorso, con porte gallardo.

Extremidades:

  • Las anteriores, cortas y musculosas, con hueso fuerte. Hombros pegados al cuerpo.
  • Las posteriores, cortas, musculosas, también con hueso sólido; muslos muy redondos y musculosos. Pelo abundante.

Manto y Pelaje:

  • Pelo: largo y abundante, sin rizar; buen subpelo.
  • Color: todos, aunque se aprecia una llamarada blanca en la frente y blanco en la punta de la cola.

Defectos: La cabeza estrecha; nariz en color rosado pálido; hocico puntiagudo; pelaje de color claro con pintas.

 

El Pequeño perro león

5/08/15, 1:22

Difiere del bichón por su pelaje, corto en el cuerpo y parte de la cola; como el del bichón, es largo en la cabeza, los hombros, las extremidades y la segunda mitad de la cola.

Este tipo de perros pequeños es muy común en Francia, y mucho menos en los demás países. Tiene la ventaja de que no consume mucho pienso para perros.

 

pequeño perro leon

 

Rasgos generales

Talla diminuta, afectuoso e inteligente; andar vivaracho. Su cuerpo es tusado en la clásica forma del barbón o perro de aguas. La cola también es tusada y debe terminar en penacho, lo que le confiere un aspecto leonino.

Altura

En la cruz, de 20 a 35 cm.

Cabeza

Corta, cráneo bastante ancho. Nariz negra, bien colocada en la prolongación del dorso del hocico

Ojos 

Redondos, de color oscuro, grandes y de expresión inteligente.

Orejas

Colgantes, largas y bien guarnecidas por franjas.

Tronco

Corto y bien proporcionado.

Cola

De largo mediano. Tusada de manera que el extremo forma un bonito penacho.

Extremidades

Derechas y delgadas.

Pies pequeños y redondos.

Manto y Pelaje

Pelo largo y ondulado, jamás rizado.

Color

Todos, uniformes o manchados, con Defectos a^unc*anc’a de blanco, negro y limón.

Cabeza muy larga; cráneo poco ancho; nariz sin pigmento; ojos pequeños y almendrados; cuerpo mal unido, desmañado; cola excesivamente larga o demasiado corta; extremidades torcidas; pies aplastados; pelo muy corto, rizado.