¡Hoy hemos empezado la clase en la calle! ¡Incluso antes de tiempo! ¿Te imaginas que tus alumnos tengan tantas ganas de comenzar una clase que incluso empiecen antes de tiempo? ¡Eso nos ha pasado a nosotros hoy!
¿Cómo no vamos a tener ganas de hacer cosas como esta?
¿Por qué no se cae la pelota?
Aunque la tensión superficial ejerce algo de influencia para que la pelota se “pegue” a la botella, lo que realmente está sucediendo es que la presión atmosférica la empuja hacia arriba.
¿Por qué no cae el agua del cubo en este vídeo?
Aunque ya he hablado sobre la fuerza centrípeta anteriormente en otra entrada, creo que es digna de mencionarla dos veces, pues ¡es la responsable de que el agua del cubo no se me caiga encima!
En la siguiente imagen estoy subida sobre dos latas de refresco vacías:
¿Por qué no se aplastan las latas?
No, no es porque no peso lo suficiente… ¡Hay que jugar con la presión!
En primer lugar, hay que asegurarse de que las latas no están melladas. Después, hay que procurar subirse a las latas completamente erguido y mantenerse así. La explicación de que las latas no se aplasten es que hay que ejercer toda la presión en el eje vertical, pues la estructura de la lata es resistente en esa dirección. Si nos inclinamos un poco hacia delante, atrás o alguno de los lados, estaremos haciendo que la componente x de la fuerza que ejercemos sobre la lata ya no sea nula, y es eso lo que arrugará la lata.
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