La motivación: un camino que conduce al éxito

Si sois fieles seguidores de mi blog recordareis que en la entrada en la que os decía que era faquira ( lo cual ya puedo demostrar oficialmente pues ayer mismo recibí un diploma que lo acredita :D ) os comenzaba a hablar sobre este tema que a mi parecer es totalmente relevante en el aprendizaje y por consiguiente en la función docente. Motivar a un alumno permite conseguir que persista en su actividad, que quiera llegar al final, alcanzar los objetivos propuestos.

Por si he topado con gente muy ocupada haré un pequeño repaso sobre lo explicado en la anterior entrada. Motivar al alumnado individualmente pasa por conocer sus gustos e intereses, despertar su curiosidad, demostrar la utilidad de ese conocimiento, conocer los conocimientos previos, innovar tanto en las actividades, los recursos, los espacios, los tiempos etc. En la materia de física y química esto es muy sencillo ya que la asignatura nos da mucho juego (como veremos en la próxima entrada, que os aconsejo no perderos, esto es en el sentido literal de la palabra).

Sin embargo, también hay otros factores que influyen en la motivación y a los cuales debemos prestar gran atención. Se trata de todo lo que rodea a las notas y a los resultados académicos en general, es imprescindible que el alumnado que se esfuerza sienta que esto también se valora, que no nos quedamos solo con la nota y hacerle ver que va a ser ese esfuerzo el que le permita lograr sus objetivos, que nada ocurre al azar. A todos nos gusta que nos digan que lo hacemos bien, siempre hay que ofrecer esos refuerzos positivos, los cuales, con gran frecuencia no se emplean pero por el contrario no dudamos en resaltar los errores. Si un alumno siente que nunca tiene éxito se rendirá y no conseguirá las metas propuestas.

Captura

Todo lo anterior nos hace pensar cual es la figura de un buen docente y sin duda hay una serie de pautas claras, para empezar debemos ser cercanos, hacer al alumno protagonista, innovar en nuestra metodología (TIC, gamificación, clase invertida, grupos coperativos) y por supuesto evitar poner etiquetas al alumnado, ya que si yo parto de que uno de mis alumnos va a suspender indirectamente yo le voy a prestar menos atención, a interaccionar en menor medida con él/ella y sin duda contribuiré a su fracaso.

Y por último algo que aprendí y me resulta fundamental es lograr una motivación intrínseca, lograr que lo que haces te guste aunque para llegar a ello tenga que haber recompensas, a todos nos gusta obtener un premio, sentir que lo hemos conseguido y además tener algo que lo demuestre.

 

 

 

 

Y ya para terminar mi diploma:

dav

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