La importancia del diagnóstico temprano en el Retraso del Lenguaje y del Habla.

¿Qué pasa cuándo un niño parece desarrollarse en consonancia a su nivel cronológico en todos los aspectos menos en el lenguaje?

Praxias ante el espejo

Si esto ocurre, lo primero  no debemos alarmarnos, pero tampoco dejar que pase el tiempo y esperar a que el niño evolucione y mejore por si mismo; debemos ofrecerle la ayuda que necesita a tiempo.

No existen limites claros que nos permitan diferenciar entre  un Retraso del Habla y un Retraso del Lenguaje, pero en general, podemos afirmar que un niño presenta Retraso en el Habla cuando comienza a emitir sus primeras palabras más tarde de lo esperado, comete errores de omisión, sustitución, alteración de fonemas, etc. Cuando el Retraso es simple es posible que a medida que el niño crece supere estos errores y continúe con una evolución normal de su lenguaje sin mayores repercusiones.

Sin embargo, podemos sospechar de Retraso de Lenguaje cuando, desde el punto de vista cuantitativo (cantidad de vocabulario) o cualitativo (diferentes áreas del lenguaje), está por debajo de la cifra media esperada para los niños de su edad. Uno de los indicadores clave es el hecho de que un niño/a cuando tiene un año de edad no dice ninguna palabra, o a los 2 años de edad no consigue unir dos palabras para formar frases sencillas, o no muestra intención de comunicarse con los demásde forma verbal o mediante gestos.

“Cuanto antes se detecte y se diagnostique antes prodremos ponerle solución”.

Es preciso descartar cualquier causa que explique el retraso del inicio del lenguaje, porque justificará también un retraso en el desarrollo y en los aprendizajes escolares. Las causas que nos indican y descartan que el problema se trate de un retraso del lenguaje pueden ser: la existencia de una deficiencia auditiva, a trastornos de origen neurológico, a un Coeficiente Intelectual (CI) inferior a la media, afectación a la memoria, motricidad, etc. Es cierto que en estas circunstancias puede producirse un retraso, pero este retraso surge asociado a la problematica del niño, no como causa aislada.

El retraso del lenguaje es una de las consultas más frecuentes en Logopedia. Cuando es tratado a su debido tiempo, el niño evoluciona de forma rápida y no tiene mayores repercusiones en su desarrollo posterior. Muchas veces no podemos asegurar que el niño evoluciona gracias al tratamiento logopedico porque principalmente mejoran cuando están madurativamente preparados para ello. Desde logopedia se intenta dar a la familia los consejos necesarios para que el niño reciba unos modelos lingüísticos apropiados de los que pueda aprender, asi como tratar de crear situaciones de interacción comunicativa en la que el niño tenga necesidad de utilizar su lenguaje, se interese por el y le encuentre utilidad. Estas interacciones se aportan también desde la escuela en el aula normal (Cuando se precisa lo trata el Maestro en Audición y Lenguaje).

Cuando los padres acuden a consuta con su hijo, probablemente el logopeda decida que no va a tratarlo de inmediato, sobre todo cuendo el retraso es leve; no obstante se mantendrá en contacto con las familias que deben informarles de su evolución. Se trata de  actuar a tiempo para proporcionar al niño los medios necesarios para que desarrolle su lenguaje con normalidad y evitar así que su retraso se convierta en un trastorno que puede repercutir en sus aprendizajes posteriores e incluso derivar en tartamudez, logo-fobia, etc.