La primera fiesta del año en Hervás es el día de San Antón, el 17 de Enero. Hace tiempo en este día la gente, después de ir a la misa de San Antón, o mas bien a sus alrededores, se iba a comer al campo el tradicional bollo de San Antón, compuesto por un pan redondo que contiene una exquisita tortilla de chorizo. Incluso recuerdo algún año en que había concursos de ganados varios. Hoy simplemente lo que queda, es medio día de fiesta oficial y la rifa de un jamón y un cebón por parte de la cofradía del santo.
En febrero, tenemos como en el resto de España, los carnavales, que unos años mejor y otros peor traen fiesta en estel frío mes
Después, la Semana Santa, que, ha pasado de ser la fiesta lúgubre que fue, a ser una excusa más para que el pueblo se llene de gente a ver las procesiones y después a ver el resto de “iglesias” que en el pueblo permanecen abiertas por las noches. Como siempre es en primavera, es una buena ocasión para con la excusa de venir a ver el campo y las flores de los cerezos, pasar unos días en Hervás, y de paso comprobar que al hervasense le va la marcha.
A principios de verano, y desde hace algunos años, se ha montado una fiesta cuando menos curiosa “Los conversos”. Se trata de disfrazar a medio pueblo de judíos, para llenar de vida y de color las callejuelas del Barrio Judío por un par de días. Además durante esos días, un grupo de actores aficionados hervasenses representan una obra de teatro, de temática relacionada con la época de la Expulsión.
Esta obra ha ido cambiando con los años Se comenzo con “Los Conversos”, de Solly Wolodarsky que trata sobre el drama que supuso la expulsión de los judíos de nuestras tierras (Obra que ha recibido un premio a nivel europeo). Actualmente se representa la obra titulada “La conversa de Hervás” Y hay que reconocer que como actores, algunos de estos hervasenses aficionados, lo hacen muy bien.
Y ya en pleno verano tenemos las dos fiestas tradicionales del pueblo. Las primeras, tienen lugar en Agosto, durante los días 14, 15, 16 y 17, y son “las ferias”, puesto que en estos días, aunque en realidad en principio se desarrollaban a primeros de Septiembre, tenía lugar en la población una antigua y prestigiada feria de ganados, que despareció con el desarrollo de las comunicaciones. Hay un anuncio muy curioso que se insertaba en el libro de ferias y fiestas de Hervás hace unos cuanto años, referente a esta feria y que decía así al finalizar el programa de las Ferias de Agosto:
“Esta Feria ofrece también:
Abundantes pastos; Cómodos abrevaderos;
Frondoso arbolado; Gratuidad por la estancia del ganado;
Servicios veterinarios en el rodeo; Estación de ferrocarril próxima al rodeo;
Buenas vías de comunicación; Administración de correos;
Telégrafo y teléfono; Medios de locomoción y transporte;
Agencia de Extensión agraria; Centros bancarios;
Establecimientos hospedería; Círculos de recreo;
Cafés y Bares; Bailes y Verbenas;
Novilladas; Deportes;
Parques y jardines; Piscinas;
Cines y otras muchas atracciones”
Estas fiestas además de su importancia económica para Hervás tenían otro atractivo: El día 14, que corresponde a la víspera de la fiesta, en lo que se llamaba “el casino de los ricos” tenía lugar una verbena a la cual acudía la gente bien de todos los alrededores, incluso venia gente desde Cáceres en los primeros coches que se conocieron por aquí. Actualmente, el día 14 de Agosto sigue siendo el día quizás mas emblemático del pueblo y seguramente es el día en que Hervás acoge a más gente en todo el año, aunque solo sea por unas horas.
En estas fiestas, a lo largo del día suele haber diversas actividades deportivas, tales como carreras pedestres, una antigua y prestigiosa carrera ciclista en el ámbito aficionado, con más de treinta años de antigüedad, natación, etc. Por la tarde el día 15 suele haber una Novillada, bastante depauperada respecto a las corridas de toros que en su día conoció el pueblo, y por la noche todos estos días hay verbenas en la plaza y en el circulo de la amistad, y bares, pubs, y discoteca para aguantar toda la noche, hasta la hora mágica de las fiestas: las 8 de la mañana, cuando los supervivientes se dirigen a la puerta del ayuntamiento para que los cabezudos los acompañen a casa. Tanto durante estas fiestas como durante las de Septiembre todos los días que hay verbena, en el descanso tiene lugar desde hace muchísimos años la suelta del “toro de fuego”, curioso artefacto para divertir, y quemar, a todo el mundo.
Las fiestas de Septiembre, los días 13,14,15 y 16, son otra cosa. Son las fiestas más queridas por los Hervasenses y son en honor del Santísimo Cristo de la Salud, patrón del pueblo. La ermita se encuentra a las afueras del pueblo, junto a la plaza de toros, en medio del castañar, y allí tendrás que ir todos los días por la mañana a tomarte unos vinitos con peces y bacalao después de la misa, en los chozos de escoba que hay por los alrededores, antes de continuar de vinos por el pueblo. Por la tarde tienes unas escuálidas novilladas y por la noche mas verbenas. Los cabezudos, esa es la pena, debido a que ya amanece mas tarde, salen a las nueve de la mañana, con lo que se complica un poco el aguantar, pero siempre hay valientes.
Por último en otoño, alo largo de varios fines de semanas tiene lugar en la comarca el llamado “Otoño mágico del Valle del Ambroz” que da lugar a una serie de actividades en torno a la naturaleza, que en el otoño hervasense se viste de colores, así como algun concierto, teatro, etc..
Y aparte de todas estas fiestas, has de saber que cualquier fin de semana del año entero, o incluso algún día entre semana, siempre que vayas a los lugares adecuados puedes pasar buenos ratos
