Hola de nuevo!!!!!!
Debatir está a la orden del día. Desde la actualidad política hasta los eventos deportivos. Aunque no se si son buenos ejemplos, ya que en los mismos podemos encontrar un montón de faltas de respeto.
Atendiendo a esto, ¿Es el debate un recurso que debemos utilizar en clase? En mi opinión la respuesta debería ser un rotundo sí, siempre y cuando no permitamos que las cosas se descontrolen con nuestros alumnos. En mi opinión, debatir permite al alumno reflexionar sobre un tema, recoger, organizar y jerarquizar ideas, evaluar evidencias, realizar conexiones lógicas y trabajar su capacidad de síntesis de la información y de organización del discurso. Es decir, trabaja un conjunto de habilidades imprescindibles para el correcto desarrollo del alumno. Estas habilidades están relacionadas con la comunicación lingüística en el registro oral, la persuasión, la argumentación…etc.
Atendiendo a todo esto, hoy os traigo una actividad que realizamos en el máster y que tiene que ver con un debate. A continuación os dejo los argumentos que nuestro grupo expuso en cada uno de los temas:
En primer lugar se plantearon tres temas distintos (Flipped Classroom, Evaluación entre pares y Gamificación) y se formaron 3 grupos (cada grupo de 5 personas en este caso). Cada grupo tenía asignado un tema en el que actuaba de moderador (1 persona), otro en el que debía defender una postura a favor (2 personas) y otro en el que defendía una postura en contra (2 personas). Para realizar todo esto, cada grupo tenía 30 minutos para preparar cada tema (tanto moderador, a favor y en contra).
Una vez terminada la fase de preparación, se dio paso a los debates. Cada debate tenía una duración de aproximadamente 10 minutos, algo desde mi punto de vista un poco corto para el tiempo de preparación empleado. El grupo moderador introducía el tema y presentaba a los grupos que discutirían en contra y a favor de dicho tema. Cada equipo de debate tenía un minuto para presentar sus argumentos, aunque posteriormente tenían otro minuto para rebatir las ideas reflejadas por los opositores. Finalmente, antes de dar por terminado el debate, el grupo moderador presentaba un breve resumen y conclusiones de los temas más importantes sobre los que se había discutido.
La evaluación de la actividad se llevó a cabo mediante una rúbrica, dividida en tres secciones, de manera que para cada grupo se pudiera evaluar su desempeño como moderador, en su postura a favor, o su postura en contra.
La experiencia fue muy interesante, ya que a pesar de que el tiempo de exposición fue corto, posteriormente se formó un postdebate con las ideas que no se habían discutido previamente, siendo todos participes de este postdebate y por lo tanto aprendiendo y discutiendo distintos puntos de vista.
¿Qué os ha parecido esta forma de debate?Como bien he dicho existen muchas otras formas, pero para mi, la clave es argumentar siempre desde el respeto y la tolerancia hacia otras ideas.
¡HASTA PRONTO!
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