La clase invertida es una nueva forma de enseñar, una metodología innovadora en la que el papel del profesor se hace mas relevante. Se trata básicamente de que el alumno tenga una primera toma de contacto con el contenido a tratar fuera del aula. Y aprovechar el tiempo de clase para comentar dudas y resolver problemas en los cuales haya habido dificultades.
El vídeo es una de las herramientas más utilizadas para desarrollar clase invertida, el profesor puede grabarse a sí mismo o editar otros vídeos que considere oportunos. De tal manera que selecciona cuidadosamente el contenido expuesto en el vídeo.
La clase invertida puede resultar una herramienta útil de manera puntual para ciertos contenidos, pero se ha de tener cuidado. Nunca se ha de basar un curso entero en el aula invertida y los vídeos no deben superar los 5 minutos. Tienen que ser vídeos concretos y concentrados en un determinado contenido, y nunca deben resultar tediosos para el alumno.
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