El trabajo cooperativo es una técnica muy valorada actualmente ya que permite alcanzar varias metas de forma simultánea. En primer lugar ayuda a elevar el rendimiento de todos los alumnos y a que las relaciones entre los mismos sean más positivas ya que aprenden a comunicarse con los demás, a dar su opinión y a enfrentarse a posibles situaciones de conflictos. Lo que se consigue con esto es que los alumnos tengan en cuenta la diversidad en las aulas y, de esta forma, se asienta el concepto de grupo y comunidad. Por otra parte, los alumnos pueden vivir experiencias que necesitan para lograr un saludable desarrollo social, psicológico y cognitivo. Además, este tipo de trabajo permite reemplazar la estructura basada en la competitividad por una en la que la base es el trabajo en equipo.
Lo que hemos hecho para experimentar el trabajo cooperativo en primera persona ha sido poner en práctica la técnica del puzzle en la que todos y cada uno de los participantes éramos necesarios para que el trabajo pudiese salir adelante. Consistía en formar grupos de 4 o 5 personas y a cada grupo se le repartían una serie de artículos científicos, uno por persona, que dicha persona tenía que leer, comentarlo con cada persona que también lo había leído de otro grupo y luego volver al grupo inicial para transmitírselo a los demás integrantes que habían leído otro artículo. De esta forma es posible llegar a una mayor información sin la necesidad de que cada persona lea todos los artículos. Finalmente, lo que había que hacer era que un miembro de cada grupo sorteado al azar expusiera un artículo de los que no había leído al resto de la clase.
Bajo mi punto de vista fue una experiencia muy enriquecedora ya que nos dimos cuenta de la importancia que teníamos todos y cada uno de nosotros para que la realización del trabajo fuera posible, esto nos hizo aprender el valor de la comunicación y del esfuerzo individual para sacar adelante el trabajo en grupo.
De todas formas, aun teniendo claro que es algo muy positivo para los alumnos, creo que no es algo viable para utilizar día a día en las aulas. Para mí lo correcto es aplicarlo en torno a una vez por semana para que los estudiantes se familiaricen con el trabajo cooperativo y aprendan valores además de contenidos pero si se aplica diariamente no sería posible dar toda la materia ya que es una actividad que requiere bastante tiempo tanto en el aula como fuera de ella.
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