Tal como el pez grande se come al pequeño, los avances en tecnología han conseguido que materiales más baratos superen las funciones de los materiales que utilizábamos y considerábamos más potentes como es el caso del paso del hilo de cobre a la fibra óptica. Gracias a este tipo de sucesos los avances suceden de manera exponencial, actualmente tenemos la nueva aparición del 5G en acceso móvil, el cual es 100 veces más rápido que el 4G que ya conocíamos.
Ahora mismo el blockchain es el futuro, estas cadenas de bloques descentralizadas son capaces de almacenar la información con una fiabilidad perfecta. La información es contenida y encriptada en los denominados bloques los cuales construyen una red en la que cada bloque mantiene la misma información. La información del bloque solo puede ser obtenida teniendo el código de acceso propio para ese bloque y, si algún bloque fuese alterado, al compararlo con una de sus múltiples copias encontraríamos el “engaño”.
¿Qué nos depara el futuro? Ya es sabido por todos que el constante avance y la digitalización del mundo es imparable, de hecho, el ordenador de más alta gama que has comprado hoy al cabo de pocos años se convierte en una baratija. Ahora la dirección de esta evolución gira en torno a la descentralización por lo que iremos viendo como surgen nuevas formas de organización de los datos y, por otro lado, nuevas estructuras sociales y distribución del poder económico.
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