El sueño – Ciudad Real

3/11/13, 13:43

Ciudad Real, cuantos años he pasado en esta ciudad y que pocos recuerdos negativos tengo.

Ciudad Real era fundada antiguamente como “Villa Real” para luego dar paso a su nombre actual, por esta ciudad ha pasado de todo y su fama viene de las fiestas tan peculiares como son “Zurra y Pandorga” que explicaré más adelante.

El motivo por el que dí con mis huesos en esta ciudad es básicamente el trabajo de mi padre, le cogieron en una oficina de Mapfre y nos trasladamos todos en unos meses a un barrio muy conocido por los lugareños como el “Eroski”. Bendito sea el barrio la de cosas que han pasado por esas calles… pero vamos por partes, terminé mis estudios de infantil y comencé los de primaria en el Colegio San José, que se situaba prácticamente en el centro de la ciudad, buenos años de mi vida, conocí a buenos amigos con los que ya no tengo apenas contacto pero seria bonito quedar algún día a ver que nos a deparado a cada uno la vida. En esos años tuve lo típico que tiene un niño, quizás algo más que el resto por el buen puesto laboral de mi padre, pero de eso un niño no se da cuenta sólo piensas en jugar y divertirte, las preocupaciones económicas vienen con la edad.

En estos años pasé desde tener la primera “novia” alrededor de los 10 años que fue el primer palo de mi vida, según comenzó el nuevo curso del año siguiente, llegó un chico nuevo mas alto, rubio y se la llevó, pero interesante concepto de “novia” a los 10 años. El caso es que me gustaba mucho esa chica.

Mas adelante y con el paso de los cursos acabé hasta las narices de tener que ir al centro todos los días y depender de cuidadoras y chicas que estuvieran conmigo por la tarde porque mis padres trabajaban mucho, por lo que ni corto ni perezoso cogí mi uniforme del colegio, lo tiré a la basura y dije que quería ir al colegio que había al lado de casa porque iba mi vecino que era mi amigo de toda la vida.

Y así fue cómo me cambié de colegio, curioso. Comencé el curso de 5º Primaria en navidades en mi nuevo centro, creo que se llamaba “Félix Rodríguez de la Fuente” y no me costó mucho sacar los cursos restantes, he de admitir que no era muy buen estudiante desde pequeño y ya me quedaban asignaturas, todo pereza nada por de falta de conocimiento.

En este colegio conocí a mucha gente grande y pequeña con la que todavía mantengo relación y muy buena, fueron buenos años desde alguna chica a conocer a un muy buen amigo mío que se llama Luis, este señor me cogió por banda y me enseñó todo lo que tenía que saber a esa edad, ya que yo era un poco pringado en esas etapas, pero bueno tonterías a parte, llegó la ESO y tuve que ir al instituto que me correspondía por domicilio, aunque había uno mas cercano fui a otro llamado “Maestre de Calatrava” porque una amiga de mi madre era profesora y claro, el “amigismo español” muy frecuente en nuestras vidas… De poco sirvió ya que tuve que irme de ahí en 3º ESO.

Aquí también conocí muchísima gente pero de no todas puedo decir que son recordadas ahora mismo, esta parte de mi vida se llama: “Haciendo amigos y enemigos”. Llega un momento en tu vida que la gente va acumulando intereses ya sea por la edad o por simples gustos y eso crea los grupos de amigos, yo tenía el mío, pero cada uno se fue distanciando un poco, recuerdo muchos amigos que vivían en pueblos cercanos como Fuente el Fresno y venían en autobús todos los días, yo no sería capaz y ahora lo valoras.

Otro dato curioso de este instituto es que estaba pared con pared con otro llamado “Juan de Ávila” al que iba mi amigo Luis. Con el iba a clase muchos días en autobús, andando etc. Se creó una gran amistad. De hecho hasta coincidimos en un campamento de verano y nos hicimos más amigos todavía porque fue toda una sorpresa, esta parte de mi vida se llama: “Coincidencias” Coincidencias por dos lados, una con Luis que reforzó nuestra amistad y pasamos unos veranos impresionantes y por otra parte coincidencia con lo que en un futuro pasará en Toledo, parece un puto cuento de Disney, chico conoce a chica con 16 años y a los 19 se vuelven a encontrar, se enamoran bla bla bla… Lo dicho, jodido Disney.

Y así fue cómo conocí a esa chica que mencioné en la entrada de “Talavera de la Reina” cómo “K.” El caso es que no sabíamos que nos habíamos conocido hace muchos años y lo descubrimos mas bien de casualidad porque estábamos hablando de que una vez montamos a caballo de pequeños en un campamento (Este campamento que no he definido todavía se llama “Campamento Granja Orea” y básicamente es estar 15-20 días viviendo en el campo pero estaba bastante bien) y fuimos hilando datos hasta que encontramos fotos y si, efectivamente habíamos coincidido un verano, puto Disney.

Llegó 2ºESO y a mi me habían quedado muchas para septiembre, las conseguí aprobar y para 3ºESO nos fuimos a otro colegio, mi amigo Luis y yo. Este se llamaba “Santo Tomás” era el típico colegio que los alumnos empiezan desde los 3 años y acaban haciendo la selectividad, entonces no había muchos alumnos nuevos que entraran entre medias de cursos y nosotros llegamos con un par en mitad de la ESO, se puede decir que nos hicimos famosos en dos días y no por algo bueno, aquí mi amigo era muy dado a “para chulo yo” y claro, si te tocan los cojones, pues saltas. Pero bueno no solo eramos conocidos por eso, también hicimos muchas buenas amistades.

Pero aquí acaba la parte bonita de la historia, mis padres se separaron y yo tuve que repetir 3ºESO. ¿Y que decidieron mis padres? Pues a un internado, que le enderecen. En ese momento yo vivía con mi padre, fue un acto instintivo, todavía me pregunto porque salieron esas palabras de mi boca:

-¿A dónde va papá?

+Se va a vivir a otra casa.

-PUES YO VOY CON ÉL.

Y nadie me detuvo, acabé con mi padre en un piso de dos habitaciones y un baño, pero la zona era bonita. Retomando el asunto anterior, cómo vivía con mi padre, él era el que decidía a que internado iba a ir, y así fue, decidió enviarme a repetir 3ºESO a un internado en Salamanca, se llama “Colegio San Agustin” y para los que seáis de Salamanca ya sabréis de que palo va ese colegio, para los que no os aclaro un poco, es un seminario. Si un seminario, para ser cura, que obviamente yo no iba a ser, mi padre decidió ese internado por algún contacto y porque estaba al lado de la casa de mi abuela, de hecho a día de hoy cuando salgo a correr voy hasta allí y vuelvo, pero bueno todavía queda mucho para la actualidad de mi vida.

Estoy introduciendo esta parte de mi vida en “Ciudad Real” y no he hecho una nueva que se llame “Salamanca” porque duré 3 meses si no menos en el colegio… a ver… no puedes pretender meter a un chaval que reniega de todo por la cantidad de mierda que se le está viniendo encima en un seminario, es que no tiene sentido, entonces el señor director del centro e internado, cuando llegaron las navidades dijo:

-Este muchacho no abraza la palabra de Dios y tiene otras novias que no son el Señor.

Si hubiera estado delante de él cuando dijo eso, primero soltaría una carcajada y luego diría… bah que voy a decir si, estaba con una chica y lo sabían los curas, punto, claro que mi novia no era Dios. Por lo menos no en ese sentido, cada uno cree como quiere.

Finalmente mi madre fue la que cogió las riendas del asunto y entre varios internados eligió uno en Toledo, se llama “Colegio Mayol” y aquí es donde acaba “Ciudad Real” y empieza “Toledo”

He de añadir que con el paso de los años he vuelto muchas veces a Ciudad Real y espero seguir yendo durante muchos años mas porque es una ciudad que me ha marcado mucho ya que he pasado la mayoría de mi vida ahí y tengo muy muy muy buenos recuerdos, aunque sólo sea un puente y esté tres días con mis amigos, siempre que voy disfruto como si tuviera 15 años y todavía saliera con Luis por el “Eroski”

Podría contar muchísimas anécdotas pero no acabaría nunca y estoy cansado de estar aquí sentado delante del ordenador, por cierto, las grandes fiestas de Ciudad Real “Zurra y Pandorga” pondré un par de fotos y al que le interese mas sólo tiene que poner en Google: Zurra y Pandorga.

Ciudad Real

Zurra

 

 

 

 

Descansen.

Dulce introducción al caos – Talavera de la Reina

2/11/13, 13:29

Este es el principio, Talavera de la Reina, conocida hace siglos como “Caesarobriga”  y actualmente por su cerámica. Se dice que es la ciudad sin Dios, rey ni semana santa y esto es porque en Talavera tenemos a la Virgen, reina y las mondas.

Mi historia aquí se puede resumir en nacimiento y algunos que otros malos recuerdos cómo por ejemplo veranos de academias estudiando y fines de semana con K. aún que eso se le puede considerar buen recuerdo, actualmente es malo. Pero como todo lo que te ha gustado pese a que te haya creado un mal, repetirías.

Algo bueno que he pasado en esta ciudad son esos fines de semana cuando vivía en Toledo, deseaba que llegara el viernes para estar con mi primo y salir el sábado, con 16 años esa era mi máxima preocupación, salir y disfrutar. Pero bueno, adelantando acontecimientos ya llegará esa entrada que se llame “Toledo” que dará mucho de que hablar.

Otro buen recuerdo es mi 18 cumpleaños, que gran noche. Mi primo y yo nacimos el mismo año, mes. día y hora; impresionante, pero no es casualidad, fue por un fin definido que es el de estar juntos toda la vida como hermanos, lo único que nos faltó es nacer de la misma madre, pero eso ya te convierte en gemelos/mellizos y pierde la gracia que le estamos dando. El caso, esa noche fue muy buena, recuerdo ir caminando por la calle a donde habíamos quedado con el resto de amigos y mirar el reloj:

-Son las 12:06.

+¡Coño, felicidades!

-Igualmente.

No es lo mismo escribirlo que vivirlo pero la conversación fue así de escueta, ahora, ese abrazo no se me olvidará nunca.

Talavera de la Reina

 

 

Descansen.

Agrupando bocetos.

2/11/13, 12:35

Dicen que viene bien abrirse a la gente, incluso a la que no conoces. No guardarte tus problemas, comentarlos y en definitiva buscarles solución. Eso dicen, pero de las palabras a los actos hay un trecho importante, en fin, dejémonos de tonterías y vayamos a lo que hay que ir:

Llevo un tiempo escribiendo cosas en “Word”, papeles por casa y en la propia cabeza, me había llegado a plantear soltarlas algún día al mundo pero no creo que paralice ninguna ciudad ni cause un desperfecto en las tranquilas vidas de la gente, a si que al final las soltaré.

Este tipo de cosas que escribo son todas del mismo tema y cada día distintas, recuerdos de un día, de un mes y dentro de poco serán de un año, un año que no ha llegado a cumplirse y que todavía no se si habría sido bueno para mi que se cumpliera, cambiaría algunas cosas, si, pero puede que a peor, he aquí el dilema de mi estancia en Salamanca.

Algún día haré una entrada que se titule: “Toda la mierda que un día prometí” y se publicará, lo juro. Hasta entonces este es el principio, comenzaré a agrupar esos bocetos para que tengan sentido entre ellos, me costará lo suyo porque son muchos y muy desperdigados pero al final todo se consigue. (Que pedazo de mentira acabo de soltar)

 

Descansen.