La importancia del coaching empresarial

profesor clases

La palabra coaching está ya integrada totalmente en nuestro vocabulario pero también en nuestra vida. Porque por sí sola la podemos definir como una manera de entrenar habilidades para poder conseguir los objetivos estipulados. Pues bien, el coaching empresarial es el que está enfocado al ámbito del trabajo en sí pero también a sus integrantes.

De ahí que se considere sumamente importante y a continuación veremos el porqué. Conocerás un poco más lo que es realmente, los tipos más comunes y cómo no sus ventajas o importancia en el sector. ¡No te lo pierdas!

Qué es el coaching empresarial

Ya lo hemos definido un poco pero no está de más que lo hagamos de la manera correcta. Porque cuando hablamos de coaching empresarial hacemos referencia a establecer un conjunto de técnicas que deben ser previamente analizadas y estudiadas para llevar a la práctica. Dichas técnicas se enfocan en el equipo humano que integra la empresa. De manera que a través de los mejores métodos se intenta conseguir más motivación por parte de cada persona y como tal, una eficiencia en el trabajo y un mejor resultado a corto y largo plazo.

Es ahí cuando también entra en juego el coaching de equipos. Ya que en ocasiones hay ciertos departamentos dentro de una empresa que necesitan de la ayuda de un profesional que los oriente con la misma finalidad que hemos mencionado: el poder llegar a unos objetivos propuestos.

Cuáles son los tipos de coaching empresarial más comunes

Son muchos los tipos de coaching, es cierto, pero nos vamos a quedar con los 6 más habituales o comunes:

Coaching sistémico

Se puede decir de él, que no se centra en un solo departamento o persona. Sino que en su filosofía se dice que todo cambio, por pequeño que sea y venga de dónde venga en una empresa, afectará a todo el resto. Esto nos indica que estamos hablando de una conexión entre cada pieza que forma ese trabajo en cuestión. Por lo que si alguien falla, siempre habrá un problema en mayor o menor medida y no será solo personal. Entre sus ventajas destacamos que permite ampliar la perspectiva, busca el bienestar de todo el grupo o grupos y se puede trabajar en momentos actuales.

Coaching ontológico

En este caso, podemos decir que el coaching ontológico es el que va a interpretar los comportamientos o interacciones de cada persona. Porque observar cada movimiento es también una buena técnica para descubrir los errores y enmendarlos. Quizás una de las mejores maneras también para poder ver cuáles son los obstáculos que pueden frenarnos tanto en la vida como en nuestro trabajo. Pero también para conocer realmente cuáles son nuestros puntos fuertes o mejores cualidades. Solo averiguando esto podremos seguir avanzando.

Coaching cognitivo o conductual

A veces vemos unidos ambos conceptos porque este tipo de coaching empresarial se centra en los pensamientos, así como las creencias y no solo en las acciones. Así que, podemos decir que tiene su parte de psicología. Porque cuando un empleado tiene una preocupación relacionada con el trabajo, no estará igual de motivado a la hora de llevar a cabo su tarea diaria. Por lo que antes de llegar a este paso, es necesario poner en práctica el coaching cognitivo para saber qué origina esas preocupaciones o angustias.

Coaching coercitivo

En este caso se trata de uno de los más polémicos a la hora de ser introducido en una empresa. Esto es debido a que se considera perjudicial, a la larga, para los trabajadores. Lo complicado llega cuando se adentra mucho más en el plano emocional, llegando a ser un verdadero juguete en manos del coach. Este hará que la persona se sienta totalmente culpable de lo malo que ocurra y además no se tiene en cuenta los sentimientos de los trabajadores. Algo que en el resto de tipos no ocurre, es más, siempre es algo valioso potenciar lo contrario porque se confía en que de ese modo se llega a mejores resultados.

Coach con inteligencia emocional

Gracias a este otro tipo de coach, sí que se da protagonismo a las emociones. Es más, te darán herramientas para poder gestionarlas de la mejor manera posible. Algo que a veces se nos puede escapar de control y jugar malas pasadas. De ahí que es otra de las técnicas perfectas cuando hablamos del coaching empresarial.

Coach de programación neuro-lingüistica

Tampoco podía faltar esta otra opción, que se debe tener en cuenta. Porque aunque sea similar a lo que venimos comentando, esta programación se centra en poder cambiar todas las emociones o la realidad más negativa, en todo lo contrario. Pero siempre de un modo perfecto para la persona y para su trabajo. Es decir, que no tendrá consecuencias negativas ni nada similar. Ya que atacará a esas inseguridades, miedos e incluso ansiedades que cada trabajador pueda tener ocultos. La finalidad sí que es sinónimo de todos los tipos que hemos mencionado y no es otra que la motivación del empleado.

Por qué es tan importante el coaching empresarial

Tal y como venimos comentando, siempre habrá un tipo de coaching que se adapte a las necesidades de tu empresa y de tu equipo. Claro que además de ello, queremos saber por qué es tan importante implementar alguno de ellos. Pues bien, solamente diremos que es un proceso que hace más fácil cualquier tipo de cambio. Ya que gracias a una serie de herramientas, de llevarlas a la práctica así como diversas técnicas, cada persona se adaptará mucho mejor a lo que venga. De modo que cuando haya algún cambio, este no se produzca de manera radical ni que las personas lo sientan de ese modo.

Además de los cambios en el equipo, el coaching empresarial también es una manera de organizar y de planificar ciertas metas u objetivos. Favoreciendo que las relaciones entre diferentes miembros sean todavía mejor. Si vamos uniendo cada una de estas piezas, se conseguirá un entorno laboral mucho más llevadero, con más motivación y eso es de lo que se trata.

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario


*

Política de privacidad