¿Conoces el síndrome de las piernas inquietas?

Autor: Doctoranytime

Algunas personas han comentado sobre la necesidad que sienten de no poder mantener las piernas quietas pero, ¿sabías que eso tiene un nombre? Así es, la desesperación por mover las piernas se conoce como “el síndrome de las piernas inquietas” y es un trastorno que le sucede curiosamente a muchas personas en el mundo, tanto jóvenes como adultas. Sin embargo, conforme avanza la edad este trastorno avanza de tal forma que puede interrumpir las horas de sueño.

El síndrome de las piernas inquietas que también es conocido como la enfermedad de Willis-Ekbom, generalmente se origina por una sensación de incomodidad, por lo que se considera una afección causada por una urgencia incontrolable de querer mover las piernas. Esta afección suele ser provocada principalmente por la noche al estar en cama acostado o incluso sentado mientras haces otra cosa.

A pesar de que este síndrome realmente no es una afección grave, sí es importante consultar a un médico ya que puede interferir en actividades cotidianas y profesionales, así como en el sueño que es muy importante para poder descansar.

¿Cómo saber si padezco del síndrome de las piernas inquietas?

Puedes reconocer que sufres de este síndrome principalmente cuando no puedes controlar las ganas de querer mover las piernas y tienes una sensación de incomodidad. Sin embargo, además de consultar a un médico que pueda guiarte de una mejor forma, los síntomas incluyen:

• Sensación de mover las piernas después de descansar
• Espasmos por la noche
• Alivio al mover las piernas
• Cosquilleo
• Hormigueo
• Dolor
• Picazón
• Sensación pulsátil.

Aunque los síntomas mencionados anteriormente son comunes, para algunas personas se presenta de forma diferente ya que no pueden explicar las sensaciones que tienen más que la necesidad de moverse. Es importante reconocer que generalmente este síndrome es común en personas que padecen de mucho estrés, lo que provoca que se muestre a través de la sensación incómoda en las piernas. También en algunas ocasiones este síndrome se puede presentar en los brazos, sin embargo, eso es todavía menos común.

Además del estrés, no se conoce una causa específica por la que pueda desarrollarse el síndrome de las piernas inquietas. Sin embargo se cree que podría ser un desequilibrio de la dopamina; la sustancia química del cerebro que se encarga de enviar mensajes para controlar los movimientos musculares. También se cree que podría deberse a otras afecciones como; diabetes, embarazo, deficiencia de hierro, magnesio o ácido fólico, esclerosis múltiple, entre otros, ya que se ha encontrado que con mayor frecuencia personas que padecen de estas enfermedades sufren del síndrome.

Evita padecer por este síndrome

Existen diferentes formas que pueden ayudarnos a evitar el síndrome de las piernas inquietas, además de la consulta con un especialista.

Primero podemos intentar hacer cambios importantes en nuestro estilo de vida, cambiar los hábitos y adoptar los nuevos que nos ayuden a reducir esa sensación de incomodidad que tenemos generalmente en las noches. Algunos de estos cambios incluyen:

- Hacer ejercicio: El ejercicio no solo es un elemento esencial para mantener un peso adecuado, también es necesario para evitar enfermedades y afecciones musculares, por ejemplo el síndrome de las piernas inquietas. Realizar ejercicio de forma regular y moderada puede ayudarnos a aliviar el dolor.

- Evitar ingerir cafeína: Se considera que también el consumo en exceso de cafeína puede ser un factor que esté provocando el síndrome, por lo que intentar reducir la cantidad de cafeína podría ayudar a disminuir la sensación de incomodidad. Puedes probar durante unos días o semanas.

- Relaja los músculos: Para relajar los músculos puedes intentar masajearlos mientras tomas un baño con agua tibia, de esta forma puedes relajarlos y disminuir los síntomas de incomodidad.

- No olvides dormir bien: Sí, a pesar de que el síndrome de las piernas inquietas puede arrebatarte la hora de sueño, es importante que practiques mantener una hora de sueño saludable y necesaria, es decir levantarse y acostarse todos los días a la misma hora y evitar desvelarse ya que los síntomas pueden empeorar si el cuerpo siente cansancio.

- No intentes resistirte: Es muy importante no resistir la sensación de querer mover las piernas, si lo necesitas, ¡hazlo! Al querer resistir la necesidad de moverse, podrías estar aumentando los síntomas.

- Consulta a un especialista: Por supuesto lo hemos mencionado antes, pero es que de verdad es un elemento importante que generalmente no se toma en cuenta. Muchas personas olvidan por completo lo importante que es consultar con su especialista las sensaciones que se tienen en el cuerpo. Por ello, lo hemos recordado tanto a lo largo de este artículo, consultar a un médico ayudará a entender cómo puedes tratar este síndrome de la forma más rápida y saludable posible.

Además de los cambios que puedes hacer en el estilo de vida, si el doctor lo cree necesario, puedes hacer uso de medicamentos que aporten y aumenten el nivel de dopamina del cerebro, relajantes musculares y que ayuden a conciliar el sueño. De ahí la importancia de consultar a un especialista. ¡No olvides lo importante que es no automedicarse!