Uno de los elementos más motivantes para los alumnos es llevarlos al laboratorio y que vean con sus propios ojos a la ciencia manifestarse ante ellos. Sin embargo, como profesores, llevar a toda la clase al laboratorio del centro puede entrañar una serie de desafíos que, aunque merece la pena afrontarlos, también evidencia la ventaja de quedarse en el aula.
Pero, ¿y si pudiésemos llevar el laboratorio al aula? O, mejor incluso ¿y si los alumnos ya llevasen ese laboratorio en sus bolsillos? Pues gracias a los smartphones esa realidad es posible. Esto es lo que hemos aprendido en la clase del jueves de Didáctica de la F&Q, a través de dos aplicaciones muy sencillas:
Sensor Mobile y Phyphox


Estas aplicaciones utilizan los sensores del teléfono, y por ello sirven como herramientas de medida tremendamente útiles. Entre los sensores se encuentran el de luz, sonido, proximidad, localización, acelerómetro… todos ellos presentan distintas utilidades.
Alguna de
las utilidades que vimos de esta aplicación, es por ejemplo medir la aceleración. La aplicación nos mide la aceleración en los ejes cartesianos x, y, z. De esta manera, sabiendo como colocamos el teléfono, podemos medir la aceleración en todas las direcciones. Una de las pruebas que hicimos fue coger el móvil y salta con él, par
a observar como variaba la aceleración en distintos ejes. Algunos experimentos muy interesantes que pueden hacerse con este sensor son, por ejemplo, medir la aceleración dentro de un ascensor, calcular un tiro parabólico o caída libre, movimiento pendular…
La aplicación de phyphox también permite realizar una sere de experimentos muy interesantes. Aunque los resultados los entrega más procesados que el Sensor Mobile, tiene algunas funcionalidades que la anterior no tiene. Por ejemplo, en esta aplicación contamos con un generador de tonos, y generador de gráficas de sonido, una herramienta para medir botes inelásticos…


