Dada la situación del crédito en general y de nuestro país en particular, están cada vez más activas y son más necesarias las nuevas alternativas financieras realizadas por empresas no bancarias, cada vez con más fuerza estas empresas se hacen con una parte del mercado de este negocio que ha sido copado casi siempre en un 100% por las entidades financieras privadas.
Sin crédito no hay recuperación y las empresas necesitan el crédito para poder subsistir por ello, buscan la manera de conseguirlo si las entidades bancarias no se lo prestan, como está ocurriendo en la actualidad. Los niveles de crédito están a la altura del 2009, siendo el que hay, poco y caro, ya que es más fácil para las entidades financieras coger dinero del BCE y destinarlo a otras operaciones mas rentables para ellos sin límites colocarlo después en deuda pública y venderla posteriormente a sus clientes con un buen margen de beneficio y casi completa seguridad, variando el destino para el que les abrió la” barra libre” del crédito en el BCE, pero la entrega de ese dinero por parte del BCE era para que el crédito circulara y con ello la reactivación económica iniciara su camino.
Ello ha provocado que las empresas se sanearan a base de recortes y bajas funcionando en una pura economía de guerra para su supervivencia, en la mayoría de las empresas que quedan. Todo ello hace que exista una situación muy propicia para que estas iniciativas de financiación ajenas al negocio bancario se establezcan y puedan como nuevos segmentos de negocio estable, entrando en competencia directa con la banca como ocurre en otros mercados como el anglosajón, celebrando las empresas supervivientes que existan estas nuevas alternativas para poder tener más posibilidades. .
Es necesario que las empresas se acostumbren a esta nueva situación, nada volverá a ser como antes. El crédito habrá que buscarlo allí donde esté, negociar las mejores condiciones y acostumbrarse a lidiar con estos nuevos agentes del mercado que irrumpirán en el mismo con mayor presencia y liquidez. La gestión financiera está cambiando la forma de hacer negocios a ritmos vertiginosos. En los mercados globales nos tenemos que mover con esas perspectivas , casi siempre, el éxito de la empresa está en saber e gestionar, entre otras cuestiones fundamentales, los flujos de liquidez de la empresas.




