Los debates pedagógicos son casi infinitos, pero hay uno que ya está cerrado: el de introducir o no las nuevas tecnologías en las aulas. Existe el consenso internacional de que deben estar presentes y la gran mayoría de los países desarrollados llevan tiempo incorporando ordenadores y pizarras digitales a los centros escolares. Lo que ahora está en cuestión es cómo usarlos. Porque las tecnologías por sí solas son solo una ayuda. El reto que se plantea la mayoría de los expertos es cambiar las metodologías y los currículos.

Hay que modificar el papel del profesor. Debe dejar de ser un orador o instructor que domina los conocimientos para convertirse en un asesor, orientador, facilitador del proceso de enseñanza aprendizaje y mediador entre los alumnos y la realidad utilizando las tecnologías.
La gran mayoría de los profesores que ha comenzado a usar ordenadores y pizarras digitales, sin embargo, considera necesario el programa Escuela 2.0
Varios Estados de EE UU cuentan desde hace tiempo con equipos para todos sus alumnos. En algunos centros tuvieron que dar marcha atrás porque comprobaron que “habían dado más importancia a la máquina que a las actividades”. “Han tenido que rectificar porque solo con tecnología no se arreglan todos los problemas. Que cada uno trabaje a su aire es muy bonito, pero los alumnos necesitan orientación, deben tener claro qué aprender”.



Hola, esto es un comentario.
Para borrar un comentario sólo tienes que entrar y ver los comentarios de la entrada. Entonces tendrás la opción de editar o borrar.