Los españoles miramos de media unas 150 veces al día nuestro smartphone, ya sea para ver el correo electrónico, usar redes sociales o servicios de mensajería instantánea. Pero además de eso también usamos el móvil como una herramienta productiva a través de la cual gestionamos nuestras cuentas bancarias o compramos de manera online. Es por ello que los gigantes, desde BBVA hasta Amazon invierten cuantiosas cantidades de dinero en optimizar su propia aplicación para el disfrute del cliente.
¿Por qué parece que sólo las grandes empresas tienen la obligación de tener una app que no sólo funcione, sino que funcione de la manera más óptima posible? Este es la idea (errónea) que reside en la mayoría de autónomos y PYMES. Una aplicación no sólo es una herramienta muy útil para el cliente, sino también es una campaña de publicidad “gratuita” ya que, si los españoles de media miramos el móvil 150 veces al día, cualquier persona que se haya descargado su aplicación verá tantas veces el logo como veces mire el móvil. ¿Ya parece que renta esa pequeña inversión verdad?
Si desea crear una aplicación para su negocio, no dude en contactar con empresas o personas especializadas que le aconsejen cómo conseguir la aplicación que más se adapte a las necesidades de sus clientes y con el mayor rendimiento posible.



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