“Los descendientes” cuenta la historia de un abogado que vive en Hawaii, descendiente de una de las familias más ricas de ese archipiélago. Esto provoca uno de los arcos argumentales en los que se ve inmerso el protagonista. Su familia tiene que vender un terreno que tienen en común con muchos de sus primos. Él es el administrador principal, y por tanto, el que tiene la última palabra sobre si vender o no.
Además, este hombre tiene una mujer que sufrió un accidente y se encuentra en coma irreversible, la cual había dejado un testamento por el que decidía que, si le ocurriera eso, se desconectara de las maquinas que le mantenían con esa vida artificial. La necesidad del protagonista de decírselo a sus amigos y familiares es el segundo arco argumental.
Y el tercero es la revelación de que su mujer le ha estado siendo infiel. Revelación proveniente de su hija mayor, a la que cuesta perdonar a su madre y que, como la hija pequeña, esta muy alejada de su padre. La obsesión por conocer la identidad y después la historia que ha unido a ese hombre con su mujer, en un momento tan duro para él es lo que termina por relacionar los tres arcos argumentales, haciendo un fiel retrato de una persona en base a sus decisiones y acciones en un momento tan trascendental en su vida.



