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Universidad de Salamanca
Blog dedicado al fenómeno migratorio y étnico
 

La historia de Sergio, un colombiano en España.

Historia de vida realizada por Sergio Sánchez Alonso (Estudiante del Grado en Trabajo Social).

Presentación del entrevistado.

La persona a la que le realizo la entrevista es un chico colombiano, más concretamente nacido en la ciudad de Barranquilla, de 28 años, llamado Sergio. Lleva viviendo en España tres años aproximadamente, acompañado de su hijo el cual tiene 5 años y de su mujer. Sergio es hijo de madre colombiana, nacionalizada española y de padre estadounidense, con el que me comenta nunca tuvo relación. Tiene una hermana que también emigró.

Situación de la historia.

Empezamos a hablar de su país natal y de su ciudad natal, Barranquilla. La cual me dice que es la cuarta ciudad más grande de Colombia. Esta ciudad podría considerarse el epicentro económico del departamento (distrito) de Atlántico en Colombia, debido a la gran cantidad de comercio e industria con la que cuentan. Barranquilla fue nombrada como “Capital Americana de la Cultura” gracias a, por ejemplo, su carnaval.

Respecto a los datos demográficos de esta población, Barranquilla posee un total de 1.274.250 habitantes (2018) y cuenta con una densidad de población de 8.274,35 habitantes/kilómetro cuadrado.

A pesar de que ha ido en descenso en los últimos, años, Barranquilla es la segunda ciudad de Colombia que presenta los datos más elevados en materia de homicidios y delitos contra la vida. En los datos se plasma la información de la que me habla Sergio.

Sergio emigra concretamente a España porque su madre emigró muchos años atrás, lo cual favoreció su proceso de migración. Sin embargo, cuando ella se fue, él y su hermana se quedaron en Colombia a cargo de sus abuelos siendo todavía menores de edad.

Su madre era soltera y ellos se quedaron en Colombia mientras ella comenzaba el primero de muchos procesos migratorios. En primer lugar, en el año 2003 emigró a Venezuela donde permaneció un par de meses, más adelante pasó a Curazao (Isla Holandesa del Mar Caribe) donde se estableció unos meses y pasó las navidades de 2003 a 2004. Después ya pasó a Europa, donde se asentó en Italia y por último llegó a España en el año 2008.

Sergio me dice que en esa isla comenzó la “odisea” y el recorrido de países de su madre, mientras ellos seguían viviendo en Barranquilla, él con 10 años y su hermana con 5.

¿Por qué emigra su madre años atrás?

En primer momento le resulta difícil explicarme los motivos, aunque finalmente, con mi ayuda, resulta ser capaz.

El primer motivo que me dice es: violencia de pareja. Me especifica que desde su persona la vivió, sin embargo, no apareció la violencia física o por lo menos a él no le tocó vivirla, pero sí hubo mucha violencia psicológica junto con daños emocionales por parte de su padre hacia su madre.

Todo esto repercutió en que ella tomase la decisión de emigrar, teniendo también en cuenta los problemas económicos que, como Sergio me dice, “tienen todos los países latinoamericanos en vías de desarrollo”.

Un dato muy llamativo que Sergio me dice es que, tan solo un 15 o 20% de la población colombiana es capaz, por los diferentes motivos que sean, de emigrar a otro país. El resto de la población que no puede emigrar, bien por motivos económicos, bien por problemas burocráticos o por problemas familiares, no les queda más remedio que vivir en su país de nacimiento, lo cual resalta Sergio,  “le depara un futuro totalmente diferente”.

Un claro ejemplo me dice que son las personas de la 3ª edad, quienes dice que viven en las condiciones más desfavorables que puedan tener. Me pone un ejemplo de la situación de las personas mayores en España, quienes reciben una pensión o alguna ayuda gubernamental y lo relaciona con la situación de este colectivo en Colombia. Dice que en Colombia no hay residencias de ancianos, que simplemente les envían a su casa literalmente a morir. El motivo es la gran estratificación y división social que existe actualmente en Colombia y en la mayoría de los países sudamericanos.

A raíz de este tema, le pregunto por el término “persona jubilada”. Sergio me dice que en Colombia las personas mayores que han trabajado durante su vida laboral sí que reciben una especie de pensión, pero identifica un fenómeno muy importante que existe en su país y es la economía informal.

Expone un ejemplo y es que, si en Colombia te quedas sin trabajo, tienes la ventaja o desventaja de que, al no tener nada que hacer, tienes que seguir “buscándote la vida” para sustentar a tu familia e intentas sacar dinero vendiendo cualquier tipo de producto. Me cuenta que esta venta no está controlada ni perseguida por las autoridades colombianas, pero, a la hora de rendir cuentas y realizar los trámites necesarios para recibir ciertas ayudas, la gran mayoría de veces no compensa todo el proceso realizado con los beneficios que se pueden llegar a obtener.

El problema que él encuentra es que la gran mayoría de la población vive en la informalidad, sin pagar Seguridad Social, sin acceso a una determinada pensión y realizando un trabajo que no se pensiona nunca.

Sergio. Cómo se prepara y por qué emigra.

Expone que el plan de migración lo comienza su madre mientras ellos la esperaban en Colombia, ansiados de que fuese a por ellos y se los llevase consigo.

La madre de Sergio logra llevarse a España a su hermana pequeña mientras él se queda en Colombia estudiando y viviendo con sus abuelos jubilados y acomodados.

Sergio seguía viviendo en Barranquilla. Acabó su educación media (dos grados y bachillerato) y se intentó matricular en la Universidad de Salamanca, más concretamente en la Escuela de Ingeniería de Béjar. Desde Colombia, tuvo que realizar algunas entrevistas e hizo una prueba de acceso online en la cual resultó aprobado y admitido. Sin embargo, posteriormente surgieron problemas consulares y no le fue posible matricularse en la universidad de Salamanca, después de todo el dinero que habían invertido en ello llegando a afectar a su propia economía.                                                                                                                                                               A raíz de esto, comienza a estudiar en una escuela de artes públicas de Barranquilla Diseño Gráfico. Terminó los estudios y pudo trabajar durante más de un año en un estudio de diseño fotográfico de Barranquilla.

Reflexiona acerca del sueldo que puede tener una única persona para el sustento de una familia ya que Sergio se casó y al poco tiempo de contraer matrimonio tuvieron un hijo.

En los primeros años teniendo una familia propia no les fue nada mal ya que Sergio y su mujer tenían trabajo y su madre les ayudaba desde España mandándoles dinero. Sin embargo, con el paso del tiempo las cosas se pusieron económicamente, según me dice Sergio, “muy feas” tanto para él como para su mujer. Perdieron uno de los dos sueldos que tenían y no les llegaba para pagar todos los gastos mensuales.

En el momento en que la madre intentó que Sergio emigrara a España, ayudando económicamente, comenzaron a surgir problemas burocráticos y de papeles.

Otro de los motivos por los que emigra, aparte del aspecto económico, sería el aspecto de seguridad. Sergio tiene una familia y un hijo a cargo, y en una situación como esa, en la única persona en la que piensa es en su hijo y en darle un futuro próspero. Por esta razón y por el entorno tan complicado en el que viven, lo mejor sería abandonar su país.

Con el trabajo que Sergio tenía, los ahorros, la ayuda de sus abuelos y vendiendo absolutamente todos los bienes que allí tenían, consiguieron obtener una cantidad de dinero suficiente para poder comprar los tickets de vuelo.

Finalmente, en el año 2018 pudo iniciar su proceso de migración y llegar a España junto con su mujer y con su hijo que entonces tenía 2 años. A la vez, pudo reunirse por fin con su madre y con su hermana, la cual se casó con un español en el año 2017.

El final del proyecto migratorio.

Su madre, que se estableció en España a finales del año 2008, ya está amoldada y totalmente integrada en la cultura y sociedad española. Esto es un factor que ha beneficiado en gran medida a Sergio y a su mujer a la hora de integrarse.

Compara la sociedad y cultura italiana en la que también se integró su madre y por lo que le cuenta, son muy semejantes.

Sergio argumenta que lo más complicado y duro del viaje fue dejar su casa, su trabajo, sus amigos y, en definitiva, sus raíces.

Habla de su ciudad de origen como una ciudad exótica y preciosa, pero tomando como referencia las explicaciones que me dio anteriormente, resulta muy difícil tener una convivencia favorable. Estas razones principalmente eran la estratificación social, la delincuencia y la corrupción que existe en gran cantidad de países de Sudamérica, concretamente en Colombia.

Llegada a España. Dificultades y fortalezas.

Sergio dice que cuando llegó a España tuvo mucha suerte de conocer gente honrada y buena la cual ayudó a él y a su mujer a integrarse de una mejor manera en la sociedad española.                                                                                                                                                                                                      A pesar de todo esto, Sergio me cuenta una anécdota que le sucedió con un compañero de piso y de trabajo. Esta persona realizaba comentarios racistas y discriminatorios hacia Sergio, al igual que muchas otras personas, y le obligó a abandonar su casa.

Insiste en que el único bienestar que busca y le importa, es el de su hijo. Si este está bien, él también lo estará. Si estuviera él solo, podría llegar a aguantar situaciones económicas pésimas, pero teniendo que alimentar a una familia es totalmente diferente.

En cuanto a las dificultades o barreras que se pudo encontrar a la llegada a España, Sergio dice que generalmente fueron pocas. Una de ellas es el acento. Una persona que te escucha hablar y nota que tienes un acento extranjero, te va a tratar de manera diferente, aunque sea inconscientemente. Lanza preguntas como: ¿de dónde eres?, ¿cómo has venido?, ¿tienes papeles? En definitiva, te prejuzgan desde el primer momento.

Tanto Sergio como su mujer tuvieron gran cantidad  de dificultades económicas, debido a la ausencia de un trabajo, lo cual provocaba un estrés y una angustia increíble al pensar que no iba a poder dar de comer a su hijo.

Otra dificultad que me cuenta es muy curiosa porque no tiene lugar en el país de destino, si no en el país de procedencia. Sergio dice que una vez comienzas a realizar el proceso de migración, los propios colombianos te tratan de una manera diferente.                                      Desde su propia experiencia me cuenta que el proceso migratorio una vez llegó a España, fue mejor que antes de abandonar Colombia. El principal motivo fue que el trato de las personas que le debían tramitar las gestiones migratorias era bastante más positivo en España que allí, porque no les gustaba el hecho de que gran cantidad de la población abandonase el país. Sin embargo, esto era un hecho inevitable a causa del estilo de vida que siguen las personas habitantes de Colombia.  Sergio se sorprende cuando desde su propio país piensan de esa manera y se da cuenta de que lo mejor que pudo hacer fue abandonarlo.

Hablando de las fortalezas que pudo encontrar al comienzo de su vida en España.

Sergio afirma que, al principio de su estancia en España, un factor que identificó como desventaja, terminó siendo para él, una ventaja. El hecho de no tener papeles de residencia fue determinante.                                                                                                     Encontrarse en esta situación provocó que aparecieran barreras y grandes dificultades a la hora de encontrar un trabajo estable. A pesar de estos problemas, Sergio persistía en la entrega de currículos en diferentes empresas y polígonos industriales de Salamanca, explicándole a los respectivos jefes que su situación era irregular en aquel momento.

Sin embargo, conoció a personas buenas, tal y como mencionó anteriormente, quienes le ayudaron a encontrar un trabajo estable y a conseguir ciertas cosas las cuales sin aquella ayuda no hubiera podido conseguir.La persona que Sergio menciona siempre cuando le preguntan quién le ayudó es su cuñado, Carlos. Este conocía a mucha gente en el ámbito de la agricultura en Salamanca y le facilitó un trabajo sembrando y recogiendo patatas, pudiendo conseguir así su primer sueldo en España.

De hecho, afirma que se siente afortunado porque tiene amigos íntimos que carecieron de la misma suerte que él en su proceso migratorio.

Todo lo que tiene ahora dice ser mejor de lo que tenía viviendo en Barranquilla. También está contento con que su hijo reciba un nivel de educación superior al que recibiría estando allí, a pesar de que no desprestigia el sistema de educación colombiano.

Concluyendo este aspecto, Sergio me dice que la integración tanto suya como la de su familia en España fue satisfactoria, a pesar de todas las dificultades por las que han tenido que pasar.

La vida en España, país de destino.

En primer lugar, dejando a un lado los asuntos laborales, económicos y sociales, aparecieron los problemas burocráticos a la hora de tramitar su regularización de papeles de residencia. Supuso una gran complicación para Sergio el hecho de no poder encontrarse en una situación de plena legalidad.

Hoy sigue estando en España de manera irregular hasta el mes de julio de este año, que es cuando podrá introducir sus documentos por motivos de arraigo social. Este concepto no equivale a obtener la nacionalidad, pero le sirve como salvoconducto en caso de tener cualquier tipo de problema con la justicia. Aun habiendo sido nacionalizada su madre y su hermana, desde el gobierno no lo consideraron así y tuvo que buscarse otros medios hasta conseguir los papeles de residencia.

Le pregunto por cómo se siente actualmente en España, mejor o peor que cuando vivía en su país de nacimiento.

Sergio me argumenta que en cuanto a calidad de vida está mejor aquí pero no como a él le gustaría. Debido a su situación irregular no puede obtener un trabajo formal y no puede salir mucho a la calle porque se siente cohibido por la situación en la que se encuentra. Sin embargo, me explica que él tiene un resguardo gracias a su madre por si se diera el caso de tener algún problema burocrático o con la policía. En cambio, su mujer no, y es por esa razón por la que debe tener mucho cuidado.

En cuanto a temas de trabajo, Sergio trabaja actualmente en una empresa de mudanzas en la cual le conocí y por esa razón le hago a él la entrevista. Las labores que realiza son de montaje y desmontaje de muebles y traslado de bienes de unas casas a otras.

Su mujer está interna cuidando de una persona mayor que sufre Alzheimer. Trabaja 24 horas seguidas y descansa las 24 horas siguientes.

Mencionado todo esto, afirma que en estos trabajos no cobran una barbaridad, pero aun así viven mejor que en Barranquilla cuando trabajaban los dos.

Hablando sobre “el mito del retorno” y reflexiones finales.

Sergio afirma rotundamente que tienen que verse envueltos en una situación de extrema necesidad para que tenga que regresar a Colombia con su mujer y con su hijo.

Lo expresa rotundo pero apenado porque a pesar de que viva en España de forma cómoda, es lógico que añore su país de origen y a parte de su familia que vive allí como son sus abuelos. El resto de su familia que son su hermana y su madre las tiene aquí.

Iría de visita o de forma temporal, pero no para establecerse, por una simple razón según explica, su hijo. Mateo tiene 5 años y se está criando en España, está adoptando las costumbres de aquí, está estableciendo relaciones con sus iguales y, sobre todo, sabe que tanto su hijo como su mujer se sienten como en casa.

No descarta abandonar Salamanca por temas de trabajo si aparecieran, y mudarse a otra ciudad. Lo que sí tiene claro es que a largo plazo no abandonará España mientras no suceda algo extraordinario. Cree que volver, sería retroceder en el proceso de mejorar su calidad de vida que inició abandonando su país hace ya casi 4 años.

Sergio insiste en que tuvo muchísima suerte debido a las personas que conoció y le ayudaron a estar donde está hoy día.                                                                                                                           Muchos de sus amigos íntimos también realizaron el proyecto migratorio Colombia – Europa.  Una amiga suya vive en Italia con su marido colombiano, también amigo de Sergio, otro amigo suyo vive en Berlín junto con su esposa, y muchos otros a los que no les ha ido tan bien pero aún así, no han regresado a Colombia, “por algo será”, resalta Sergio.

Como última reflexión personal Sergio expone que la juventud colombiana con pocos recursos que quiere salir adelante, tiene que salir del país y buscarse la vida en otro lado para intentar triunfar si de verdad lo desean.

¿Lo volverías a hacer?

Sergio afirma que sin duda lo volvería a hacer. Cambiaría las condiciones en las que lo hizo porque le hubiese gustado llegar por ejemplo, con un resguardo de estudios o con un permiso de trabajo. Recalca también, que disminuiría si pudiese la cantidad de trámites burocráticos a realizar para llevar a cabo un proyecto migratorio así.

A pesar de que Sergio sigue en situación irregular, aunque ya por poco tiempo, se siente feliz porque está con su familia, están todos sanos, juntos, y sobre todo su hijo que, como ya hemos podido identificar, ha sido y es el factor más determinante en todo el proceso migratorio, para él y para su esposa.

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