Historia de vida realizada por Laura López Cembellín (Estudiante del Grado en Trabajo Social)
La persona entrevistada, Amala Kemal, es una chica inmigrante proveniente de Tánger, Marruecos. Tiene 22 años y realizó sus estudios en el IES Isabel de Castilla, ubicado en la provincia de Ávila.
Amala emigra desde Tánger a Ávila. Afirma haber vivido muy bien en Marruecos, debido a que asistía a un buen colegio y su padre había montado su propio negocio en Tánger. Debido a motivos referentes a su seguridad y para labrarse un futuro más seguro ya que, la calidad de la sanidad y la educación no eran muy buenas; su padre, decidió emigrar a España, por lo que asumimos que la migración fue voluntaria. El padre de la entrevistada solicitó un visado de turista para conocer España, le gustó y decidió pedir un permiso de trabajo para poder emigrar a España. Cuando le concedieron dicho permiso, empezó a trabajar en nuestro país y, pasado un tiempo, solicitó en la Oficina de Extranjería el permiso de reagrupación familiar para poder traer a su familia consigo. La migración de la familia se produjo el 10 de diciembre del año 2006, justo antes de que se produjese la crisis económica en España. En Marruecos no existía ningún conflicto bélico, pero debido a la calidad de los servicios y a los conflictos bélicos de países cercanos, como por ejemplo Siria, los familiares de la protagonista decidieron emigrar al concebir a España como un país más seguro y con más oportunidades laborales.
El proyecto migratorio surgió a raíz de la intencionalidad de su padre por migrar a España, como hemos mencionado con anterioridad ya que, fue el que planeó el viaje y decidió conocer anteriormente cómo era el país y las posibilidades que le brindaba para una vida mejor. Al principio, a la entrevistada le pareció muy duro el cambio debido a que le costó adaptarse al idioma y al clima, puesto que, el primer año que estuvo en nuestro país nevó muchísimo y nunca antes había visto nevar y lo pasaba bastante mal cuando salía a la calle por el frío que hacía en Ávila. Otro aspecto que más afectó a Amala fue el de tener que permanecer 1 año sin poder ver a su padre, puesto que, como hemos estudiado anteriormente, uno de los requisitos para solicitar la reagrupación familiar, es haber permanecido un año en España y tener una autorización que le permita al individuo permanecer, al menos, otro año más en nuestro país.
Las mayores dificultades a las que se enfrentó Amala fueron la adaptación al idioma y la adaptación a la cultura, que fue bastante ardua, además de que en Marruecos el clima es mucho más cálido. Es importante destacar que emigró a una de las provincias más frías de Castilla y León, Ávila.
Las partes positivas o fortalezas más destacadas que adquirió Amala fueron el hecho de que consiguió superar el periodo de adaptación y que, también ha salido enriquecida en muchos aspectos, sobre todo en el cultural, puesto que, aprendió nuestro idioma y tradiciones y no le costó asimilarlas a la vez que mantenía sus propias costumbres y su religión. Actualmente está estudiando traducción en España y se encuentra muy cómoda. Podemos decir que como forma de integración se produjo el multiculturalismo, que enriquece a la persona pudiendo mantener sus costumbres a la vez que se integra y aprende las de la sociedad a la que migra.
No ha regresado a su país de origen. Por el momento está cómoda viviendo y estudiando en nuestro país, pero no descarta volver definitivamente puesto que, echa de menos Marruecos.
La protagonista afirma que volvería a venir a España, debido a que ha conocido a multitud de personas y ha aprendido muchas cosas acerca de nuestro país. En un principio, no estaba convencida porque no tuvo otra opción puesto que, fue el padre el que organizó la reagrupación y el que tomó la decisión, pero acabó quedándose prendada de nuestro país.
