El cine español muchas veces ha dejado mucho que desear, y más en un género como es el terror. Pero surgió una luz cuando Jaume Balgueró nos trajo “REC”. Esta entrega, la cual tuvo mucho éxito, y a pesar de no ser un filme con excelente presupuesto precisamente, trajo esperanzas al género en España.
Esta película era bastante buena. Grabada a modo de reportaje, y con unos actores que más bien parecía que improvisaban (de hecho hubo bulos sobre que era así), fue entretenida y desenfrenada. Con dosis justas de sangre, y numerosos sustos inesperados, el éxito de esta película no era algo cuestionable. Al poco tiempo, la historia se repitió, aunque con algo menos de auge, con “REC 2″, donde pudimos ver un aumento en el presupuesto y prácticamente lo mismo que en la primera, pero ahondando en la trama, lo cual fue gratificante. Nos aseguraba una hora y media pegados a la silla, la verdad, fue una buena secuela.
Pero las buenas noticias se acabaron aquí, pues lo bueno se iba a acabar. No entiendo por qué teniendo buenas ideas y guionistas, se dejaron llevar por la rapidez, tal vez, y sacaron “REC 3″. A ver, no es que fuera mala, es que la esencia de la película se pierde por completo. Si bien podía haber sido mejor encauzada, fue terrible. Toques de humor continuamente, grabaciones ahora si, grabaciones ahora no, esta película se convirtió en un circo. Los actores, unos medianamente buenos y otros dejaron bastante que desear. En conjunto, un espectáculo que ni miedo, ni asco, ni sustos, en fin, nada. Menos mal que al menos el final no repara en ñoñerías y americanadas, aun así, desastre total.
Realmente os voy a recomendar esto si queréis ver la continuación de la segunda parte, pero os aviso que salvo dos frases, no tiene nada que ver con sus predecesoras, pues es una historia paralela a las de la 1 y la 2. Si no es por eso, no os llevaréis sensación de haber visto una película, ni siquiera decente.
Un saludo 
“Hoy es mi día” – Clara
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