Sin duda alguna se puede considerar el S.XX como uno de los más sangrientos de la historia humana ya que se registraron muchos millones de víctimas derivadas de las diferentes guerras sucedidas en este período de tiempo. Además, se produjo una revolución en el mundo armamentístico debido al cambio de las armas. Se crearon las primeras ametralladoras que permitían una ráfaga de disparos sin levantar el dedo del gatillo, unos rifles de asalto semi-automáticos que no necesitaban cargarse después de cada disparo y, sobre todo, la aparición de armas de larga distancia utilizadas por francotiradores que tenían una efectividad prácticamente mortal. También se crearon bombas de humo, incendiarias e innovadas granadas de mano, así como explosivo plástico que permitía una gran explosión con una reducida cantidad de detonante.
Sin duda, este siglo estuvo marcado por dos acontecimientos: las dos guerras mundiales (1914-1918 y 1939-1945).
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