LAS TICS EN LA EMPRESA

El secretario del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación en Aragón (COITAR) analiza la importancia de introducir las nuevas tecnologías en el ámbito empresarial

Hoy en día nadie cuestiona que las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) están ligadas al crecimiento económico. Pero para conseguir el máximo beneficio de las TIC, las empresas deben contemplarlas dentro de una estrategia tecnológica sostenible en el tiempo. No vale con comprar el kit PC-ADSL-paquete ofimático a todos nuestros empleados, para creer que las TIC han entrado a formar parte de nuestra política empresarial: los recursos físicos son solamente el primer paso. Actualmente, esta simple implantación de las TICs ya no supone una ventaja diferenciadora, competitivamente hablando, sino más bien una necesidad para no quedarse atrás. Es en la capacidad de gestión de estas TICs donde podemos gozar aún de cierta ventaja competitiva. No basta con tener tecnología, hay que saber cómo y para qué usarla. De hecho, debe darse una profunda modificación en la mentalidad empresarial. La incorporación de nuevas tecnologías no podrá ser efectiva sin un soporte humano lo suficientemente preparado como para llevarla a cabo. La adopción de la tecnología no supone un cambio únicamente en el proceso de trabajo, sino en la organización de la empresa y su cultura.

Obviamente, una mayor inversión en TICs nos reportará múltiples beneficios, como por ejemplo:

Reducción de tiempos y costes: Las TICs mejoran la relación de los diferentes agentes de la cadena, agilizándola gracias al uso de sistemas B2B (business to business: e-commerce entre empresas para compra-venta de bienes y servicios, útil en el trato con proveedores). También, hacen más fácil la gestión empresarial interna con las aplicaciones ERP (Planificación de los Recursos de la Empresa, que cubren las necesidades de prácticamente todas las áreas funcionales y reducen las tareas repetitivas). E igualmente, optimizan la logística y almacenaje (soluciones de radiofrecuencia resistentes al ruido industrial permiten al trabajador por medio de terminales móviles asignar tareas, controlar actividades y resolver incidencias en el almacén, por citar un ejemplo tecnológico).

Las relaciones con el cliente se ven reforzadas: Las nuevas tecnologías permiten que el cliente reciba una atención más personalizada y que la empresa pueda conocer con mayor profundidad el perfil del usuario de sus productos y emplee estrategias de fidelización, gracias a las aplicaciones CRM (Gestión de Relaciones con el Cliente: soluciones informáticas diseñadas con el objetivo de construir una relación duradera con los clientes, identificando y satisfaciendo personalmente sus necesidades).

La comunicación interna de mi empresa en más sencilla: Con el uso de una Intranet corporativa, entendiendo como tal, una red segura adecuada al uso interno de mi organización. Además, herramientas de trabajo en grupo o workflow mejoran la comunicación entre empleados y sistemas de gestión documental nos facilitan la organización de nuestros contenidos.

Mejorar la posición en el mercado: La utilización del comercio electrónico nos permite acceder a nuevos mercados y clientes potenciales de todo el mundo con el uso de sistemas B2C (business to customer, entendidos no sólo como nuestra página web estática sino como un comercio electrónico entre empresa y cliente en toda regla, con su pasarela de pago segura e inmediatez en la actualización de nuestros catálogos de venta). Yendo más allá, las herramientas de inteligencia del negocio (que sirven para analizar datos, realizar estimaciones y simular escenarios, basados en experiencias pasadas y proyecciones futuras, como data mining) junto con las que dan soporte a la decisión, ayudan a convertir la información en conocimiento útil que nos otorga un posicionamiento por delante de la competencia.

Sin embargo, una vez que nos hemos decidido a implantar las tecnologías de información y las comunicaciones de manera más profunda en nuestra organización, además de la lógica infraestructura, lo primero con que debemos contar es con un factor importantísimo: el soporte humano que la lleve a cabo y la mantenga en el tiempo. Surge entonces otra pregunta para el empresario: ¿debo incluir en plantilla personal especializado en TIC o contratar los servicios de una empresa externa?

La externalización proporciona a la empresa una flexibilidad en la gestión de recursos, minimizando la mano de obra sin utilidad inmediata en la empresa, ajustándola a las necesidades del mercado. Sin embargo, aunque esta solución parece la acertada para actividades periféricas (no críticas de mi negocio), parece más cuestionable si nos referimos a las claramente situadas en el ámbito propio, esenciales para el desarrollo de mi organización. En estas últimas, debemos controlar y gestionar su impacto, y aunque podamos delegar o no ciertas tareas, aspecto éste que vuelve a depender del tamaño de mi empresa, es conveniente contar con recursos internos que las gestionen. Por eso, quizás lo más conveniente para una empresa usuaria de TIC sea una modalidad mixta, es decir, no disponer en nómina de un amplio elenco de profesionales que se ocupen de toda la tecnológica (situación inviable con toda probabilidad), pero sí disponer de unos pocos, con la formación tecnológica adecuada, que a la vez que no pierdan de vista el negocio particular de la organización, observen qué actividades, procesos o servicios pueden verse apoyados por la tecnología, y a partir de ahí, busquen soluciones que luego las compañías externas pueden implementar.

Aparece ahí un nicho para aquellos profesionales TIC con titulaciones correspondientes, que pueden ejercer su profesión en empresas no TIC, sino usuarias de la tecnología. Serían perfiles más generalistas (no tan especialistas como los que sí trabajan en el sector TIC: empresas de telecomunicaciones e informática) y con un alto carácter multidisciplinar. Debido a ello, cada vez son más comunes los titulados que refuerzan su formación con estudios de postgrado o masters, compatibles con su carrera profesional, acerca de la gestión empresarial.

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario


*

Política de privacidad