Las TIC se están convirtiendo en un instrumento cada vez más importante en la actualidad por lo que el profesor debe acercar a los alumnos a la cultura de hoy, no la cultura de ayer. Por consecuente, el profesor debe adaptar sus métodos educativos al siglo XXI, utilizar las nuevas tecnologías para sacar el máximo partido al proceso de enseñanza-aprendizaje ya que las nuevas generaciones van asimilando de manera natural esta nueva cultura.
Entonces, ¿Por qué no integrar las TIC en la educación? Promoverían la motivación y el interés en los alumnos, se creará una educación interactiva, cooperativa, participativa… Facilitaría la comunicación entre profesor y alumno, entre los propios alumnos y podría conseguir un acercamiento entre la escuela y la familia.
Un profesor que utilice las TIC puede servir como guía para sus alumnos y transmitirles una buena utilización de estas. Es importante que los alumnos hagan un buen uso de las nuevas tecnologías pero para ello deben de tener a alguien que sepa guiarles en este campo y los muestren todas las ventajas que tiene para obtener el máximo beneficio y conseguir una educación eficaz.
Para conseguir integrar las nuevas tecnologías en el aula, el maestro debe de ser buen conocedor y tener formación sobre estas pero no todos estarán dispuestos a implantar estos nuevos métodos o bien por qué no crean en ellos o simplemente no quieran invertir tiempo en esta formación. La base del buen profesional es el reciclarse y sacar el mayor partido a todos los avances, en todos los campos, para conseguir ser un buen profesional. Con esto quiero decir que para ser un buen profesor tendremos que invertir tiempo en mejorar en nuestra profesión y estar abiertos a que otros nos enseñen para nosotros enseñar mejor.
El profesor que lleve a cabo esta modificación en las herramientas educativas perseguirá también el objetivo de disminuir el fracaso escolar y crear una escuela eficaz.
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