La educación en Puerto Rico: para una revolución social

10/02/13, 20:37

“Los estudiantes les faltan el respeto, los padres los amenazan, los directores los acosan y el sistema los tiene en muy baja estima. En los últimos años, la violencia contra los maestros ha aumentado dramáticamente, según un informe de la Asociación Americana de Psicología (APA).”

Así comienza una noticia de noticel del 27 de enero de 2013 resaltando la violencia que viven los maestros día a día en Estados Unidos. Tampoco se puede olvidar la masacre llevada a cabo en Conneticut con el asesinato de cuatro maestros, incluyendo una puertorriqueña. Pero como siempre sucede en Puerto Rico, se carece de datos concretos en torno a la situación de la educación en la isla. De todos modos es un secreto a toda voces: es evidente que la educación en Puerto Rico está en crisis. Pero ¿hasta dónde ha llegado esa crisis? Y peor aún, ¿Por qué hacemos de la vista larga ante esta realidad?

Los problemas de la educación en Puerto Rico van en ambas vías. Los mismos comienzan desde la politización del mismo sistema hasta con el objetivo final del mismo: el estudiante. ¿Cómo es que el estudiante va a mejorar en matemáticas o en inglés si ni siquiera tiene un libro para practicar con ejercicios? ¿Cómo podrían los maestros mandar asignaciones si los estudiantes no tienen libros? ¿Cómo es posible que el Departamento de Educación es de las oficinas de gobierno que más presupuesto tiene asignado, incluso en Fondos Federales, y casi no llega presupuesto en las escuelas? Hay escuelas en Barrio Obrero que apenas los baños de los maestros no tienen ni puerta para ir al baño privadamente. Y ni hablar de los baños de los estudiantes. ¿Cómo puede funcionar una escuela en normalidad si todos los años tiene un director diferente?

No se puede negar que muchos maestros no hacen su trabajo bien. Pero el el papel de los padres es fundamental dentro del proceso enseñanza-aprendizaje de los alumnos. El maestro no puede tener absoluta responsabilidad de todos los problemas de los estudiantes, tanto en lo académico como en lo social, cuando los estudiantes son hijos de padres o responsabilidad de encargados ¿Para que seguir poniendo la mirada en metas y expectativas que han sido fijadas por el Gobierno Federal desde la imposición de la Ley “No Child Left Behind si no se cumplen? El hecho de que más del 90% de las escuelas de Puerto Rico no pasan las pruebas puertorriqueñas es prueba contundente de que algo anda mal. ¿Habrá alguna relación en que muchas de las escuelas de Puerto Rico no se sientan como comunidades de aprendizaje y que los programa de Bellas Artes y de Estudios Sociales se encuentren prácticamente en estado de coma? El debate de la educación en Puerto Rico merece no solo una profunda reflexión, sino cambios profundos. Si estos cambios no pueden ser llevados desde adentro del sistema, entonces será necesario pensar cómo se pueden llevar a cabo desde afuera. Quién sabe si la educación puede ser la verdadera revolución puertorriqueña del siglo XXI.

Citado de la siguiente página de internet: http://www.noticel.com/noticia/134397/alarmante-la-violencia-contra-los-maestros.html

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