Tarde de bicicleta

Último día del verano del 2007, se nos ocurre la brillante idea de dar un paseo en bicicleta, la cosa no empezó muy bien porque ninguna teníamos bicicleta, pero lo solucionamos cogiendo una de mi prima pequeña, el problema era que la bicicleta era mayor, por no decir vieja, estaba oxidada, era para nosotras La Chaveta, era perfecta ya que entrabamos dos. Si la cosa empezaba mal, seguiría peor. Al principio controlábamos la situación, bajábamos la cuesta perfectamente pero tuvimos que parar en una intersección. Estábamos a la puerta de las piscinas…
-¿Ahora qué hacemos que no tenemos cuesta para impulsarnos?
-Nos acercamos a la barandilla y yo te impulso mientras tú das pedales.
Dimos marcha atrás muy despacio para acercarnos a la barandilla. En ese momento apareció un individuo con gafas de sol comiendo un trozo de pan con queso. Nos miro. Le miramos. Nos miro. Le miramos. Dimos marcha atrás de nuevo. Nos miro. Me pisaste. Nos miro. Te pise. Nos miro. Nos caímos. Nos seguía mirando. Le seguimos mirando. Y no se movió.
No es que no se moviera es que se la sudaba, seguía comiendo su puto trozo de pan con queso. ¡NOS SEGUÍA MIRANDO! Mientras nosotras estábamos en el suelo, La Chaveta encima nuestro, mirando si teníamos alguna herida. Y lo único que se le ocurrió al individuo decir fue “¿Os empujo?”
Nos levantamos del suelo mencionando a su madre, cogimos La Chaveta y nos fuimos andando mientras ÉL seguía mirando.

emee

, ,

Se han bloqueado los comentarios.
Política de privacidad