La Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos y LaLiga han presentado esta mañana el Observatorio de la piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales 2016 dónde se puede comprobar que en España se redujo este ilegal consumo en un 4% en el año 2016. Sería la primera vez que esto sucede en los últimos 10 años ya que gracias a la mejora de las conexiones de Internet y la cultura digital que se ha ido creando dicho consumo se ha encontrado en un auge continuo dónde ha sido imposible controlarlo por más esfuerzos que se han aplicado.
Según el informe presentado en el 2016 hubo 4128 millones de “accesos ilegales”, un 4.2% menos que en el año anterior lo que supuso unas pérdidas para la industria de 23 mil millones de euros aumentando un 7% el lucro cesante (lo que se ganaría si la piratería no existiese). La directora de la coalición afirma que las medidas impuestas para evitar estas ilegalidades están suponiendo un impacto positivo en el consumo. El cine es el campo en el que más descargas ilegales se producen (32%) seguido de series, películas, libros, juegos y fútbol. Por el contrario los libros y la música siguen en aumento y su consumo digital aumenta cada día más gracias a los e-book en el caso de los libros.
Cuando buscamos una explicación a este consumo masivo nos encontramos con que la mayoría de las personas encuestadas se justifican afirmando que se debe a un “precio excesivo de los contenidos legales” o “comodidad a la hora de consumirlos”. En mi opión este descenso de la piratería es debido a la salida al mercado de aplicaciones legales como Netflix que ofrecen un servicio de contenido digital legal a un precio muy reducido (inferior a los 5€) y mucha gente poco hábil en el arte de las descargas prefiere pagar esa cuota que romperse la cabeza con las descargas ilegales.
No se pueden poner barreras al campo




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