Control de un sistema Domótico
Las aplicaciones más comunes suelen ser las que tienen relación con la seguridad: alarmas, sistemas antirrobo, alarmas para fugas de gas, incendios o inundaciones.
La calefacción y la climatización de los espacios se programan de acuerdo a la temperatura ambiente para que se enciendan o se apaguen. Otra opción es programarlas para que estén encendidas antes de que lleguemos a nuestra casa y así encontrar un ambiente agradable.
El riego automático del jardín también se puede programar para no tener que ocuparnos personalmente, o para que las plantas sobrevivan cuando no estamos. Un sistema domótico puede controlar la apertura y cierre de persianas y toldos (para aprovechar el calor del sol en invierno, y evitarlo en verano).
El alumbrado también es sencillo de controlar mediante la domótica. Se puede establecer un sistema para que las luces del exterior se enciendan cuando se va el sol, y se apaguen por la mañana, y para iluminar la entrada a la vivienda. Estos sistemas también sirven para el interior, y son una buena forma de ahorrar energía eléctrica.
Los electrodomésticos pueden también programarse mediante sistemas domóticos
Podemos programar el frigorífico para que se mantenga a una temperatura durante el día y a otra temperatura diferente durante la noche.
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