Segundo lunes de clase del año y parece que venimos un poco más motivados que la semana pasada. Nuestra profesora María Jesús nos ha pedido que traigamos una caja de zapatos y papel de seda blanco, ¿qué haremos hoy? ¿Qué tendrá que ver una caja de zapatos con enseñar física y química?
¡Vamos a construir una cámara oscura! Con ella podemos ver la realidad del revés. Su funcionamiento es análogo al del ojo humano: la imagen se invierte debido al paso de los rayos de luz por una lente convergente.
Para construirla, hacemos un corte rectangular en uno de los lados de la caja (por el que vamos a mirar) y un agujero con la punta de un boli en el lado opuesto. Colocamos papel de seda en el centro de la caja pegado a las paredes con pegamento o celo y… ¡voilá!
Solo tenemos que enfocar nuestra cámara hacia donde haya más luz, para ver mejor el contraste, puesto que con el papel de seda se va a ver un poco borroso. Así se ve el edificio de enfrente:
Personalmente, a mí siempre me resultó un poco difícil entender el funcionamiento de las lentes y espejos en el instituto, porque eran como algo extraño que no aparecía en la vida diaria. Quizás si alguien me hubiese hecho mirar por la ventaja con una caja de zapatos, lo habría entendido mucho mejor.
Buzz Lightyear levantando una tuerca
Después de esta actividad, María Jesús nos repartió otro “experimento”. Consiste en pasar una cuerda por dentro del plástico de un boli bic (sirve cualquier objeto cilíndrico similar, siempre que esté hueco por dentro) y atar a cada uno de sus extremos un objeto. Lógicamente, en resposo, un objeto estará apoyado en el extremo superior del boli, mientras que el otro estará colgando.
¿Se te ocurre cómo hacer que el objeto colgante se eleve?
¡Solo hay que haer girar el boli! La fuerza centrípeta se encargará del resto. Aquí puedes ver una demostración.
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