Además de los citados con sus comarcas, Béjar, Ciudad Rodrigo, Alba de Tormes y Vitigudino, hay que destacar las siguientes localidades entre otras muchas que, con vuestra ayuda, se irán añadiendo:
La Alberca
Su entorno, la belleza de sus calles y la forma en que sus gentes han sabido compaginar la restauración con la conservación hacen de La Alberca uno de los pueblos más bellos de toda España.
Cuenta con aproximadamente 1000 habitantes, este pueblo es único en España, las calles confluyen serpenteantes por doquier por una población donde se paró el tiempo hace mas de un siglo , las batipuertas de sus casas nos hablan de un pasado artesanal llamativo, sus calles empinadas reciben diariamente a multitud de turistas.
Ya en la Prehistoria dejaron aquellos artistas vestigios en esta zona de las magnificas pinturas rupestres que podemos contemplar en la Cueva de Cabras Pintas. Cerca de este pueblo se halló en la Edad media la preciosa imagen de la Virgen de la Peña de Francia, venerada por los vecinos no solo de la localidad sino de la Comarca.
Sus fiestas el 15 de agosto son un espectáculo declarado de Interés Nacional, sus corridas de toros, bailes y charangas donde la gente viste los trajes típicos nos dejaran atónitos por su belleza colorido y tradición.
Las mantelerías y pañuelos o mantones bordados a mano de gran belleza y creación son vendidos al paseante , trabajados por manos serranas durante muchos meses e incluso años.
Excelente gastronomía en toda la zona, recomendamos la ternera morucha típica de Salamanca y el cabrito cuchifrito.
Peñaranda
Se encuentra situada a 40 Kms de Salamanca dirección Madrid, Cabeza de Partido, de gran importancia comarcal y agrícola-ganadera.
Monumentos a destacar : El conjunto de Iglesia y Convento de las Madres Carmelitas: La Iglesia data de la primera mitad del siglo XVII consta de una nave de tres cuerpos; a través de dos puertas existentes en el testero de la Capilla Mayor, accedemos a la Capilla de Loreto. Observamos al lado del evangelio la Capilla de San José, obra de Fray Pedro de la Visitación.
Ledesma
Fantastica Villa que conserva buena parte de su muralla con su empedrado típico y su castillo en el extremo sudoeste de la misma conocido como la fortaleza encontrándose en buenas condiciones por las rehabilitaciones recibidas. Ledesma por su cercanía a Salamanca (35 Kms) es de suma importancia en la comarca.
Durante la época romana, estos dejaron vestigios importantes como el Puente Mocho o el Puente de Peñaserracín, así como los verracos de piedra; en esta localidad de Ledesma se han perdido varias puertas de acceso a la amurallada ciudad, así como pequeñas Iglesias, Ermitas y un convento franciscano.
Principales Monumentos: Existe en la Iglesia Parroquial de Santa Maria la Mayor un mojón con el nombre de Cesar Augusto y referencias a Bletis nombre del Cónsul Romano que en el año 93 gobernaba la ciudad que hoy conocemos por Ledesma, y llamada en esta época Bletisa en honor a su cónsul, mas tarde se llamaría Letisa y finalmente Ledesma.
En el medievo la cruzaban seis importantes rutas:
La Colada de Fermoselle, El Cordel de Almeida, El Cordel de Ciudad Rodrigo, las Veredas del Asmenal y de Peñalvo, así como la Colada de Doñinos de Ledesma.
El río Tormes en su incansable encuentro con el Duero, la baña y su riqueza agrícola-ganadera es reconocida. Destacan su Iglesia de Santa María realizada en piedra pajarilla, es del final del Siglo XII con escudos de los Señores de Beltrán de la Cueva, primeros Condes de Ledesma; La portada hispano flamenca data del siglo XVI. la plaza de toros de la Peña del Pajar de 1916 es de gran interés local.
Recomendada visita y degustación de los cangrejos y ancas de rana.
Aldeadávila de la Ribera
Localidad a 100 Kms de Salamanca en Las Arribes del Duero, es una gran villa, que tiene un gran pasado. Por su enclave fronterizo con Portugal ha sido siempre un punto de referencia en los Mercados agrícolas y ganaderos. Su riqueza por La Presa de la Almendra y su herencia del Duero la hace una población excepcional. El 17 de noviembre de 1962 se inauguro la Presa y los grandes generadores entraron en funcionamiento el último día del año de 1963: en 1988 se inaugura otra nueva central eléctrica.
Monumentos a destacar:
La Iglesia data del siglo XVI construida por Pedro de Lanestosa, hay en ella un retablo del siglo XVIII cuyo autor fue Diego Salcedo. Se trata de un edificio con una torre de 46 metros de altura, de las más altas y bastante desproporcionada con la construcción.
La maravillosa Ermita del Cristo del Humilladero de 1610. La Ermita de la Santa donde existe un retablo de La Inmaculada de gran belleza procedente del abandonado y desaparecido Convento de la Orden Franciscana de las Verdes de Santa Marina que fue bombardeado por los ingleses en 1700. .
Ermita de San Sebastián: situada en la zona de Corporario. Data de 1762 y construida en el antiguo cementerio, donde existen dos sepulcros o panteones del siglo XVIII. La Iglesia del Corporario: Del Siglo XII, románica y la mas antigua de las localidades colindantes.
Palacio de D. Jerónimo Manuel Caballero:
Llamada así en honor de del Marques de Caballero que fue Ministro de Carlos III data este palacio del siglo XVIII y es de estilo neoclásico. Su construcción se realizó en granito, y sustenta en su fachada el gran escudo heráldico de sus armas.
MIRADORES: El Picón de Felipe, el mirador del Fraile accesible por el conocido Llano de la Bodega y los miradores de la Salida de Líneas.
Miranda del Castañar
Es uno de los lugares de cita obligada en un recorrido por la sierra de Francia, por sus indudables valores arquitectónicos y su rico entorno natural.
Su casco antiguo está declarado Bien de Interés Cultural. El paisaje urbano es un conjunto de aire medieval, compuesto por construcciones populares de mampostería y madera, típicas de la sierra de Salamanca, y casas blasonadas en piedra de sillería.
Recorrer la localidad supone un “viaje al pasado”, cuando judíos y moriscos habitaban sus calles. Además de edificios nobles y viviendas de tipo tradicional, la villa cuenta con otros monumentos de interés. Empezando por la antigua muralla que la rodea y sus cuatro puertas que dan acceso a la zona histórica: la de San Ginés, la de la Villa, la de Nuestra Señora y la del Postigo. Destaca especialmente el entorno formado por el Castillo, fechado en el siglo XV, y la plaza de Armas. También hay que mencionar, la Torre de las Campanas, que data del siglo XVII, situada en la plaza de la Iglesia; y el edificio de la Alhóndiga, sede actual del Ayuntamiento, que fue construido en 1585. Asimismo, Miranda del Castañar conserva dos de las cinco ermitas que tuvo: la del Humilladero y, fuera del recinto amurallado, la de la Virgen de la Cuesta.
Candelario
Resulta inolvidable la imagen de la villa recostada sobre las laderas de la Sierra y, en lo alto, las nevadas cumbres de más de 2.000 metros. Un conjunto de casas blancas se apiñan a lo largo de las empinadas calles, en las que llaman la atención las regaderas, esas acequias urbanas por donde discurre el agua proveniente de neveros y manantiales.
El origen de Candelario se atribuye a una colonia de pastores asturianos y su origen es muy remoto, teniendo ya importancia en tiempo de los romanos. El descubrimiento, en un muro, de una piedra tallada con la cabeza del Dios Jano, es algo que hace más fiable ese posible pasado romano.
El pueblo puede presumir de tradición chacinera, que se remota varios siglos cuando estas gentes transportaban sus ricos manjares a lomos de caballerías hasta la corte. De hecho, en Candelario tuvo su origen la famosa frase “atar los perros con longaniza”, para dar a entender abundancia o riqueza.
En la entrada de las casas destaca la batipuerta, medio portón hecho de madera que evitaba la entrada de animales o nieve a la vivienda. Otros elementos de la casa-fábrica son la habitación de la matanza y el enorme sobrao, donde se curaban los productos al amparo del humo. Una visita teatralizada al museo de la casa chacinera permite conocer esta forma de vida.
El entorno natural proporciona muy variadas posibilidades: senderismo, paseos a caballo, esquí, bicicleta todo terreno o las emociones de los deportes de montaña.
