¿Estás pensando en renovar tu oficina o en crear una nueva desde cero? Si es así, sabrás que el mobiliario es uno de los aspectos más importantes a la hora de diseñar un espacio de trabajo cómodo, funcional y productivo. Sin embargo, elegir el mobiliario adecuado no es una tarea fácil, ya que hay muchos factores que influyen, como el espacio disponible, el número de trabajadores, el tipo de actividad, el presupuesto o el estilo. Por eso, en este artículo encontrarás algunas claves para que sepas qué mobiliario básico no puedes olvidar a la hora de buscar equipamiento para oficinas y espacios comerciales.
¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir el mobiliario de oficina?
Antes de entrar en detalle sobre los elementos imprescindibles del mobiliario de oficina, es conveniente que tengas en cuenta algunos aspectos generales que te ayudarán a tomar la mejor decisión. Estos son:
- La ergonomía: Se refiere al grado de adaptación del mobiliario a las características físicas y psicológicas de los trabajadores, así como a las condiciones ambientales del lugar de trabajo. Un mobiliario ergonómico favorece la salud, el bienestar y el rendimiento de los empleados, ya que evita lesiones, dolores, fatiga o estrés. Por eso, debes elegir muebles que se ajusten a la altura, al peso, a la postura y a las necesidades de cada persona, y que permitan regular su posición, su inclinación o su altura.
- La funcionalidad: Se refiere al grado de utilidad y eficiencia del mobiliario, es decir, a su capacidad para cumplir con las funciones para las que ha sido diseñado. Un mobiliario funcional facilita el trabajo, el orden y la organización, ya que ofrece el espacio, el almacenamiento y la accesibilidad necesarios para cada tarea. Por eso, debes elegir muebles que se adapten al tipo de actividad que vas a realizar, al número de personas que van a trabajar y al espacio disponible, y que ofrezcan soluciones prácticas y versátiles.
- La estética: Se refiere al grado de armonía y belleza del mobiliario, es decir, a su capacidad para crear un ambiente agradable y acogedor. Un mobiliario estético mejora el clima, la imagen y la motivación de los trabajadores, ya que transmite sensaciones, emociones y valores. Por eso, debes elegir muebles que se ajusten al estilo, al color y a la iluminación que quieras darle a tu oficina, y que reflejen tu personalidad, tu filosofía y tu cultura empresarial.
¿Qué elementos no pueden faltar en el mobiliario de oficina?
Una vez que tengas claros los aspectos generales que debes considerar a la hora de elegir el mobiliario de oficina, es hora de pasar a los elementos específicos que no pueden faltar en tu espacio de trabajo. Estos son:
- El escritorio: Es el mueble principal de la oficina, ya que es donde se realiza la mayor parte del trabajo. Por eso, debe ser amplio, resistente y ergonómico, para que puedas colocar tu ordenador, tus documentos y tus materiales, y para que puedas trabajar sin forzar la vista, el cuello o la espalda. Existen diferentes tipos de escritorios, como individuales, compartidos, modulares o en forma de L, que se adaptan a diferentes necesidades y espacios. También puedes elegir entre diferentes materiales, como madera, metal, cristal o melamina, según el estilo que quieras darle a tu oficina.
- La silla: Es el complemento indispensable del escritorio, ya que es donde vas a pasar la mayor parte del tiempo sentado. Por eso, debe ser cómoda, acolchada y ergonómica, para que puedas apoyar tu espalda, tu cabeza y tus brazos, y para que puedas regular su altura, su inclinación y su posición. Existen diferentes tipos de sillas, como giratorias, fijas, con ruedas o sin ruedas, que se adaptan a diferentes gustos y preferencias. También puedes elegir entre diferentes colores, tejidos y diseños, según el ambiente que quieras crear en tu oficina.
- El armario: Es el mueble auxiliar de la oficina, ya que es donde vas a guardar tus documentos, tus archivos y tus objetos personales. Por eso, debe ser espacioso, seguro y funcional, para que puedas almacenar todo lo que necesites, y para que puedas acceder a ello de forma fácil y rápida. Existen diferentes tipos de armarios, como abiertos, cerrados, con cajones, con estanterías o con puertas correderas, que se adaptan a diferentes volúmenes y formatos. También puedes elegir entre diferentes tamaños, formas y acabados, según el espacio y el estilo que tengas en tu oficina.
- La mesa de reuniones: Es el mueble complementario de la oficina, ya que es donde vas a recibir a tus clientes, a tus proveedores o a tus colaboradores. Por eso, debe ser grande, estable y elegante, para que puedas albergar a todos los participantes, y para que puedas transmitir una imagen profesional y de confianza. Existen diferentes tipos de mesas de reuniones, como redondas, cuadradas, rectangulares o en forma de U, que se adaptan a diferentes números y disposiciones. También puedes elegir entre diferentes materiales, como madera, metal, cristal o mármol, según el nivel y la calidad que quieras ofrecer en tu oficina.
Como has visto, el mobiliario es un elemento básico que no debe faltar en una oficina, ya que influye en la comodidad, la funcionalidad y la estética del espacio de trabajo. Por eso, debes elegirlo con cuidado, teniendo en cuenta la ergonomía, la funcionalidad y la estética, y optando por los elementos imprescindibles, como el escritorio, la silla, el armario y la mesa de reuniones. Así, podrás crear una oficina que se adapte a tus necesidades, a tu gusto y a tu presupuesto, y que te haga sentir bien y que te ayude a lograr tus objetivos. ¿A qué esperas para ponerlo en práctica? ¡Tu oficina ideal te está esperando!