Ingresar a la universidad no solo significa el último eslabón de la cadena estudiantil, sino también la elección del camino por el cual quieres conducir tu vida profesional, a fin de cuentas es la actividad u oficio a la que te quieres dedicar el resto de tu vida, y por supuesto sacar rentabilidad de ello. De aquí radica la complicación o facilidad con la que puedas tomar la decisión.
Se supone que la preparatoria tiene como función definir tus habilidades, pasiones, destrezas en diversas áreas de estudio, es el primer acercamiento hacia los beneficios y condiciones de diversas carreras profesionales, pues está comprobado que la elección es únicamente del estudiante, es él quien debe reconocer por si solo en que materias es más ágil, cual le despierta más interés, que disfruta más.

Son muchas las dudas que pueden saltar a la cabeza cuando se acerque el momento de tomar la decisión, es normal, lo primero que debes hacer es investigar, consigue en internet la lista de carreras y licenciaturas, documéntate sobre las diversas opciones de universidades y carreras, horarios, pensum de estudios, ubicación, duración. Esto te ayudará a crearte un esquema entre lo que quieres y lo que te ofrecen las instituciones, de esta maneras puedes priorizar las posibilidades.
No caigas en estos mitos, y elige la mejor carrera universitaria
- Debo tomar una decisión rápido: ¡Falso! Tomate tu tiempo, déjate asesorar, investiga, visita, nútrete de información, pero jamás olvides que la elección es únicamente tuya, de nadie más. Es válido un año sabático que te permita realizar actividades que se relacionen con la carrera que más te llame la atención, de esta manera tu selección tendrá bases solidas.
- Consultar un asesor vocacional: claro que puede funcionar, la ayuda siempre será válida, pero recuerda que esta persona será solo un guía, no tiene una fórmula mágica que te indique el camino que debes tomar.
- Elegir una carrera que me genere mucho dinero así o me guste: estamos de acuerdo que las ganancias que puedan provenir de tu carrera universitaria es un punto importante de consideración, pero no es el focal. Si disfrutas lo que haces, lo harás excelente y trabajo no te faltará.
- Si no me gusta, me salgo y perderé tiempo: no pienses esto nunca, todo lo que se aprende jamás se olvida, esos conocimientos siempre los tendrás en ti, tómalo como una inversión de tiempo y comienza de nuevo, nunca es tarde.
- Tengo familiares o a amigos que estudiaron algo y les va bien, haré lo mismo: ¡No! Cada experiencia es única, no te cierres a la oportunidad de vivirla tú y ser ejemplo.
Elije la mejor carrera universitaria
- ¿Qué te gustaría hacer todos los días de tu vida? Esta es la primera pregunta que debes hacerte al iniciar el camino de la elección. Autoanalízate, anota todas las actividades que te generan interés, entusiasmo. Revísala todos los días y ve tachando aquellas con las que no te sientas 100% identificado, en pocos días tendrás menos opciones y la elección comenzará a aparecer.
- ¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades? Evalúa tu desempeño en la preparatoria, en que materias te iba mejor y en cuales no, de allí puedes definir el área que te gusta, puede ser ciencias, medicina, ingeniera, si quieres una licenciatura o una técnica.
- Investiga todo sobre las carreras lideres e tu lista: pensum de estudio, lista de carreras y licenciaturas, duración, materias que dictan, metodología de estudio, universidades donde las puedes estudiar, los posibles trabajos en los que te puedes desempeñar, cuanto es el aproximado del sueldo que puedes ganar. Esto te permite prepararte emocionalmente, aspecto importante.
- Deja a un lado la pasión: no te decimos que no respetes tu vocación, todo lo contrario, ponla en primer lugar, apartada de tu emoción, pues debes concientizar que más que una carrera, es un estilo de vida. Estas por iniciar un camino en el cual el éxito esta sustentado en el ensayo y el error.
- Tu familia es tu apoyo: no te dejes influenciar, pero si comparte con ellos las inquietudes que tengas, tan vez se les facilite identificar mejor tus fortalezas y debilidades, las actividades en las que destacas, una opinión en conjunto puede ser la luz que te ayude a determinar una opción ya pensada.
Ingresar a una universidad no es cuestión de moda, lineamientos políticamente correctos o complacencias, se trata de una decisión sería que amerita responsabilidad y compromiso, disciplina y paciencia, pero sobre todo, que te identifiques y sientas a gusto con lo que estás haciendo, de esta manera en menos de lo que crees estarás siendo un profesional con vocación, pasión y orgullo, que disfruta cada cosa que hace y la lleva a cabo con amor.
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