En los años 20 la Tuna salmantina alcanzó su mayor relevancia social, llenando teatros y casinos con sus actuaciones, participando en numerosos actos sociales, siendo recibida por las autoridades locales en las diferentes ciudades por las que viajaba, y obteniendo numerosos trofeos y galardones, así como donativos que eran empleados en causas benéficas.
Los salmantinos se referían a la Tuna Universitaria como “la Viejecita”, reconociéndola cariñosamente de esta manera como la Tuna más antigua y con más tradición.
A lo largo del S XX y en estos años del XXI, la Tuna Universitaria ha realizado numerosos viajes por todo el mundo y ha participado en numerosos Certámenes Nacionales e Internacionales realizados en España y en el extranjero.
Entre las personalidades que ha rondado esta Tuna se encuentran: S.S el Papa Juan Pablo II, el Príncipe de Asturias en 1924, los príncipes del Japón y su hijo, los Príncipes de Gales, varios Presidentes de Gobierno, tres Premios Nóbel, entre ellos Leopoldo Senghor presidente de la República del Senegal, los presidentes del Congreso y del Senado de trece países de Hispanoamérica, la primera ministra de Irlanda, y una lista interminable de personajes de la política nacional y extranjera, así como algunos personajes de la vida nacional: D. Manuel García Pelayo, Dª Gloria Begue, D. Antonio Pedrol Rius, D. Gonzalo Torrente Ballester, la Duquesa de Alba o el Duque de Suárez.
La Tuna Universitaria grabó en los últimos años del siglo XIX, el que quizás pueda ser el primer testimonio sonoro de una Tuna, aunque su audición se hace difícil por el estado de deterioro en el que se encuentra el rollo de fonógrafo. En los años 20 se grabó un disco en Madrid, posteriormente en 1960 otro que junto con los grabados en 1981 y 1992, y el más reciente de 2001 completan el repertorio discográfico de esta Tuna.
Como testimonio visual y reflejo de nuestra tradición estudiantil esta Tuna ha participado en el rodaje de numerosos documentales, largometrajes, cursos de español televisados, etc., tanto para España como para el extranjero.
Tampoco se ha olvidado nuestra Tuna de sazonar su historia fomentando lo más genuino de sí; la picaresca. Por esta razón la historia de la Tuna Universitaria de Salamanca está repleta de historias de balcones, de alcobas y también de cantinas, de premios y de descalificaciones en concursos. No se puede decir que nuestra historia sea insulsa.