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Universidad de Salamanca
TIC-TAC: Enseñanzas Digitales, Aprendizajes Virtuales
Los avances tecnológicos y su aplicación al mundo de la educación y la formación
 
Diapositiva 10

COMPETENCIA DIGITAL

La Competencia Digital es una de las competencias recogidas en las Competencia Básicas que desarrolla el currículum oficial, es por ello que es importante que se desarrolle tanto a nivel del alumnado, como a nivel docente, y por ello, debemos prestarle especial atención.

El siguiente post de EL CAMAROTE, publicado el 4 de mayo de 2012, por Departamento TIC, nos analiza su importancia, sobretodo a nivel docente:

COMPETENCIA DIGITAL DOCENTE

Competencia digital docente
Publicado el 4 mayo 2012 por Departamento TIC

Aunque todavía no se evalúe con criterios unificados, se supone que ya todos los docentes sabemos que la competencia digital es una de las competencias básicas que cualquier joven debe haber desarrollado al finalizar la enseñanza obligatoria para poder incorporarse a la vida adulta de manera satisfactoria y ser capaz de desarrollar un aprendizaje permanente a lo largo de la vida, según anexo I del vigente R.D. 1631/2006, por el que se establecen las enseñanzas mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria, y las indicaciones del Parlamento Europeo sobre competencias clave para el aprendizaje permanente. Recordemos que la alfabetización necesaria para que cualquier ser humano pueda participar en la sociedad está directamente relacionada con la adquisición de esas competencias, y que las capacidades que conforman la competencia digital son imprescindibles en la nueva sociedad y economía del conocimiento del siglo XXI, a pesar de que muchos docentes todavía no lo vean así o consideren que no sea de su incumbencia.

Difícilmente podremos desarrollar esa competencia digital en nuestros estudiantes sin una correcta integración del uso de las TIC en las aulas (para lo cual es necesario disponer de conectividad amplia y estable en todos los espacios) y que los docentes tengan la formación necesaria en esa competencia. Son los dos factores más importantes para una plena integración de las nuevas tecnologías en educación, todavía no resueltos satisfactoriamente en bastantes lugares a pesar de los esfuerzos realizados con ese fin. La conectividad irá llegando a todas las aulas, pero será más complicado que haya un suficiente nivel generalizado de competencia digital docente si no hay un marco común de referencia que permita validar esa competencia (que todavía algunos consideran algo opcional o reservado para quienes tengan afición a la informática) y desarrollar un plan de formación coherente con una propuesta de indicadores evaluables que permita reforzar una de las áreas de la profesionalización docente peor atendidas en la formación inicial.

Es algo que ya se ha hecho en otros países, aunque con diversos matices, orientaciones y niveles de concreción:

Estados Unidos: NETS for Teachers (traducción al castellano en Eduteka) y NETS for Administrators (traducción), de la International Society for Technology in Education (ISTE).
Australia: ePotential Continuum Framework.
Francia: C2I2e Certificat Informatique et Internet enseingnant.
Dinamarca: EPICT – The European Pedagogical ICT Licence. Programa de formación y certificación con vocación internacional que han seguido 60.000 docentes daneses y ha sido aplicado en otros países.
Chile: Marco de Competencias TIC, creado por Enlaces, Centro de Educación y Tecnología.

Las Normas UNESCO sobre Competencias en TIC para Docentes (NUCTICD) proporcionan un marco de estándares que permite a los proveedores de formación para docentes vincular sus cursos con estos objetivos políticos más amplios de mejora de la educación y de desarrollo económico y servir de referencia para las diversas políticas de formación inicial y permanente. El proyecto NUCTICD hace hincapié en la relación entre la utilización de las TIC, la reforma de la educación y el crecimiento económico, hipótesis que corroboran los tipos de desarrollo de estados tan diversos como Singapur, Finlandia, Irlanda, Corea y Chile, que hace 35 años eran países pobres. También se basa en la hipótesis de que las TIC son motores del crecimiento e instrumentos para el desarrollo de las capacidades y la autonomía de las personas, que tienen hondas repercusiones en la evolución y mejora de la educación, siendo la preparación de los docentes el elemento clave para un uso integrado eficaz. La formación en competencia digital docente es por tanto algo cuya importancia va más allá del ámbito educativo y que requiere una atención prioritaria, seria y coordinada por parte de la administración del estado.

En Europa, dentro del marco de la Agenda Digital para 2020, el Instituto de Prospectiva Tecnológica (IPTS), uno de los institutos que forman parte del Joint Research Centre (JRC) de la Comisión Europea, publicó hace unos meses el informe Mapping Digital Competence: Towards a Conceptual Understanding, elaborado por Kirsti Ala-Mutka, que propone identificar los componentes clave de la competencia digital, desarrollar un marco conceptual con descriptores validables a nivel europeo y ofrecer una hoja de ruta para el uso y revisión de este marco conceptual. Se espera que el estudio esté completo a finales de este año.

Imágenes procedentes de “Mapping Digital Competence…”, Ala-Mutka (2011).

Gráinne Conole, en Digital Literacies (2012), analiza el informe y subraya la importancia de incorporar las tecnologías emergentes y la colaboración de los profesionales docentes en redes sociales. El uso eficaz de los nuevos medios sociales son una potente herramienta para el desarrollo profesional (…digital literacies that are needed by learners, teachers and researchers to exploit the potential of new technologies and to enable them to connect and communicate in a plethora of ways. The digital literacies needed are far more participatory and interactive, the distributed network of others that we connect with is as important as the way in which we access and use information on the Internet).

Tal como indicaba Katia Pozos en su comunicación en JUTE (Jornadas Universitarias de Tecnología Educativa) 2011, “Tecnologías emergentes, competencias digitales relevantes para el profesorado universitario en la sociedad del conocimiento”, la complejidad de la identificación, selección y organización de las competencias de un profesional es una tarea ardua, colectiva, consensuada y adaptada a los contextos de actuación que configuren su acción personal, social y profesional. Pozos propone un modelo con una serie de “unidades de competencia digital”, 5 fases de integración y 5 niveles de dominio y grado de complejidad de la competencia.


Figura 2. Modelo de integración de la competencia digital en el desarrollo profesional docente (Pozos, 2010:157)

El modelo podría ser también válido para el profesorado no universitario con una concreción específica. No obstante, no debería ser tan complicado establecer un marco común de mínimos, cuyos descriptores sean validables y que cualquier profesional docente pueda acreditar. Es lo que parece proponer el modelo de competencias digitales EUROLAT, creado por élogos, con 6 dimensiones o unidades (buscar, integrar, crear, compartir, trabajar en red, gestionar la reputación digital), que se concretan en 4 niveles y 10 descriptores para cada dimensión. Aunque la especificación de los descriptores no aparece publicada, por lo que no podemos comentar su pertinencia, los principios que establecen en la introducción del modelo pueden ser una buena guía para su concreción:

Las Competencias Digitales han de ser medibles y estandarizables.
Su objetivo es obtener comportamientos de éxito, es decir, que permitan alcanzar los resultados deseados.
Han de estar relacionadas con la utilización de la tecnología a su alcance, facilitando así su desarrollo en paralelo con la evolución tecnológica.
Se relaciona con el uso de la tecnología no con la tecnología en sí, evitando un modelo asociado al uso de determinadas herramientas.
Se han de basar en conocimientos y habilidades comunes a los individuos al ser éstos los únicos rasgos, de los mencionados anteriormente, medibles de manera objetiva.
Se han de contemplar dentro de un entorno similar o ser adaptadas al mismo, de tal manera que los factores externos tengan una incidencia lo más pequeña posible.

Esta entrada fue publicada en Educación y TIC.

Monica Moya Lopez

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TICs-TACs: ARENDIZAJES VIRTUALES Los avances tecnológicos y su aplicación al mundo de la educación y la formación nos han llevado a reformular las metodologías de formación y las metodologías en las aulas, por lo que debemos tener en cuenta las nuevas situación y entornos de aprendizaje.
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