It’s the eye of the tiger
It’s the thrill of the fight
Rising up to the challenge of our rival
And the last known survivor
Stalks his prey in the night
And he’s watching us all with the eye of the tiger

                                                                                                             Survivor

La motivación es el combustible que le da energía y poder a tus metas, es la clave para entender por qué persistimos en la persecución de ciertos logros que no dan ningún fruto a corto plazo,  es el conjunto de elementos que activan, dirigen y mantienen nuestra conducta. Por ello es esencial trabajarla, y no sólo en el ámbito académico.

Cualquier cosa puede ser una fuente de motivación, algo que aparece cuando menos te lo esperas y te empuja a seguir adelante, puedes encontrarla en cualquier momento y lugar, cualquier cambio, cualquier alteración de tu rutina habitual que ta saque de la monotonía nos vale, así que aprovecha al máximo cada oportunidad que te de la vida.

La música y el cine son algunos elementos que suelen resultarnos motivantes. ¿Quién no siente un cosquilleo en el estómago cuando suena el famoso “Eye of the Tiger” de Survivor?, o cuando lo que escuchamos es el “We are the champions” de Queen. ¿Quién es capaz de permanecer impasible cuando Aragorn y Théoden cargan contra los orcos desde la fortaleza de Cuernavilla,?, ¿Quién no ha sentido esa emoción al escuchar a Mel Gibson en “Braveheart” hablando de la libertad?, ¿Y cuando Al Pacino pronuncia su archiconocido discurso de las pulgadas en “Un domingo cualquiera”? Esa es la magia de la motivación.

Aquellos que, como yo, hayáis estado metidos en el mundo del deporte seguro que conocéis la importancia de la motivación en este campo, para mi siempre fue algo fundamental. A vosotros os dejo mi vídeo favorito de motivación deportiva.

Pero vamos a lo que nos ocupa, ¿Qué motiva a mis estudiantes? ¿Cómo generó en ellos esas inquietudes por aprender tan necesarias? Los estudiantes del Master de Secundaria estuvimos dándole al coco y se nos ocurrieron algunas ideas:

Conecta con sus intereses, descubre lo que les gusta y aprovéchalo. Plantea actividades diferentes, dinámicas, que se salgan de la rutina, en las que tengan autonomía y puedan enfrentarse a retos adaptados y superamos. Déjales elegir, háblales de tú a tú, valora sus opiniones y felicitarlos cuando cumplan sus objetivos.

¿Cómo?¿Qué todavía no sabes como hacerlo? Pues échale un ojo a mi siguiente entrada.

¡Hasta pronto!