Sistema de blogs Diarium
Universidad de Salamanca
Blog de Antonia Durán Ayago
Miscelánea
 
6
Archivo | 22 junio 2016

Increíble, pero cierto

Es muy legítimo disentir en las ideas. El pensamiento monolítico conduciría al estancamiento. Es saludable que existan debates sobre, por ejemplo, qué tipo de educación queremos, qué sanidad, cómo queremos orientar el crecimiento, qué queremos potenciar, si de nuevo el ladrillo o la sociedad del conocimiento… Todo eso es legítimo y saludable. Por eso la pluralidad de opciones políticas está garantizada en nuestra Constitución. El pluralismo político es una de las bases en la que se asienta nuestra todavía frágil democracia.
Lo que ya no es tan de recibo es esto en que se ha convertido la política española. Lodazal donde los haya en donde priman las luchas intestinas, donde campa a sus anchas la corrupción, donde los partidos no tienen pudor en volver a poner como cabezas de lista a quienes han demostrado su ineptitud e incompetencia, siquiera sea por haberse rodeado de corruptos. Ahí tienen, por ejemplo, a Esperanza Aguirre, que destaca por tener o haber tenido a su alrededor a toda una pléyade de corruptos. No puede si no ser señal de lo que se cuece en el Partido Popular. Todo huele mal. Pero lo peor no es eso; lo peor es que todavía haya gente que no se ha dado cuenta de que no sólo es un partido corrupto, sino que gobierna para el interés de unos pocos, no para el interés general. La trama púnica es sólo un pequeño ejemplo. La noticia que se publicó ayer sobre los centros concertados en Madrid es una prueba más que se une a lo dicho.
En este estado de descomposición generalizada, sería conveniente que las nuevas opciones políticas que se plantean actuaran realmente como revulsivos. Hay mucha buena y honrada gente, con voluntad firme y decidida para hacer las cosas bien, tanto en las opciones políticas ya conocidas como en las nuevas. Esperemos que pesen más esas voluntades que otras circunstancias.

Comentarios { 0 }
Política de privacidad
Studii Salmantini. Campus de excelencia internacional